Los malos hábitos que afectan a la salud de tu corazón y aún desconoces
Además del sedentarismo, el peso o una mala alimentación, existen muchos otros factores que afectan a tu salud cardiovascular
Córdoba - Publicado el - Actualizado
4 min lectura
La gran mayoría de personas llevan una vida nada adecuada para mantener una buena salud cardiovascular con el paso de los años. Ya lo dicen los estudios, nueve de cada diez infartos de miocardio se producen por algún tipo de factor de riesgo como el sedentarismo, sobrepeso, mala alimentación, alcohol, tabaco o falta de control de enfermedades como son la diabetes o la hipertensión arterial, que actúa en silencio.
Pero no solo están estos factores, porque hay otros muchos que afectan de manera negativa a nuestro corazón, como el estrés crónico que también actúa en silencio y cuando nos da algún aviso, a penas le hacemos caso. También encontramos la falta de vitamina D, que estos meses tanto se está hablando, después del estudio dirigido por el doctor Quesada del Hospital Reina Sofía de Córdoba, que han demostrado junto a un gran equipo, que se puede amortiguar los síntomas graves del coronavirus en pacientes ingresados en Unidades de Cuidados Intensivos de los hospitales. Pero además de todo esto existe uno que a muchos ni se les pasa por la cabeza, se trata de una mala higiene bucal.
Ahora en tiempo de pandemia, nuestra vida ha sido afectada de manera que una gran mayoría ha dejado de practicar deporte, cuatro de cada diez no sigue una dieta saludable y un 40% reconoce no estar en su peso.
Por todos estos motivos no podemos olvidar que las enfermedades isquémicas del corazón son la primera causa de fallecimiento en España. Es el momento de abrir bien los ojos y leer con atención algunos hábitos que pueden poner en riesgo tu salud cardiovascular:
ESTRES
Ya lo hemos dicho anteriormente, vivir con niveles altos de estrés durante un largo tiempo es muy perdudicial. Ese estrés con el paso del tiempo se convierte en crónico y puede provocar problemas de hipertensión arterial, arritmias e incluso favorecer enfermedades como isquemias cerebral (ictus), infarto o angina de pecho.
El estrés obliga al corazón a trabajar de manera más forzada, por lo que tensa los músculos, incrementa la frecuencia cardíaca, aumenta la presión arterial y por lo tanto demanda más oxígeno. Si tu vida es demasiado acelerada, toma medidas y comienza por reducir actividad diaria o bien hacerla de manera más relajada. Haz un paréntesis entre actividad y actividad, y tómate unos minutos para relajarte.
HIGIENE BUCAL
Una incorrecta higiene bucal está relacionada con un mayor riesgo de padecer hipertensión o incluso un accidente cardiovascular.
Debido a una mala higiene bucal, aparece las enfermedades periodontales, que provoca una inflamación de las encías, y si no se trata, la encía comienza a retraerse llegando la posiblidad de perder piezas dentales. En la época de nuestros abuelos se hablaba mucho de ella, como piorrea.
VITAMINA D
Aunque en España tenemos mucha radiación solar, más de la mitad de la población tiene niveles bajos de vitamina D, lo que puede aumentar el riesgo de padecer hipertensión. La luz solar es fundamental para sintetizar la vitamina D en el cuerpo, pero también una mala alimentación.
Existen muchos alimentos altos en vitamina D como la leche, cereales fortificados, pescados grasos como la caballa, el salmón, el atún o las sardinas. También el hígado vacuno, yema de huevo y el queso. Pero muchos alimentos debemos ingerir para tener unos niveles buenos, por lo que en muchas ocasiones debemos recurrir a complementos siempre revisado por un especialista.
MAL DESCANSO
Está demostrado que aquellas personas que duermen menos de seis horas tienen un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, en comparación con las que descansan 7 u 8 horas.
Las cifras son preocupantes, porque cuatro de cada diez españoles no duermen bien o lo hacen de manera insuficiente, y solo un 29% tienen un sueño placentero.
RONCAR
¿Quién no tiene una pareja que ronca? Las personas que lo hacen en exceso padecen de apnea obstructiva. Si la persona que ronca se queda algunos segundos sin respirar y vuelve a hacerlo con un sobresalto, padece de esta patología.
Esto provoca que los niveles de oxígene en sangre disminuya de manera busca, produciendo irregularidades en el ritmo cardiaco. Con el paso del tiempo, aumenta el riesgo de hipertensión, derrame cerebral, infarto de miocardo o insuficiencia cardíaca.
DEPORTE
Siempre hemos escuchado que practicar deporte es positivo, pero como todo en la vida se debe buscar un punto intermedio. Todo aquel deporte que supongan un esfuerzo extra al que no estemos acostumbrado es muy perjudicial para el corazón.
Todo deporte depende de la capacidad de cada uno, pero podemos afirmar que realizar ejercicio disminuye los riesgos cardiovasculares cuando se sobrepasa los 42 minutos diarios de alguna actividad aunque sea moderada.
Antes de ponernos a hacer deporte como un loco, lo mejor es consultar con un profesional de la salud para que después de un chequeo médico, nos indique cuál es la más adecuada.
Lo mejor es mantener un estilo de vida saludable y prevenir todo aquello que pueda afectarle a nuestro corazón. También es importante tener una revisión médico al menos una vez al año. Siguiendo todos estos consejos, velarás por la salud de tu corazón, que es el motor de tu vida.