Una feria con alma en la provincia de Huelva: Chucena celebra la única feria medieval de España organizada por y para personas con discapacidad
La residencia La Viña organiza este sábado la tercera edición de un evento único en nuestro país, donde la inclusión, la tradición y la emoción se dan la mano.

Entrevista a Antonio Haldón García
Huelva - Publicado el
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Este sábado, Chucena volverá a convertirse en un pueblo de otra época. Sus calles acogerán la tercera Feria Medieval organizada por la residencia La Viña, una cita sin precedentes en España que pone a las personas con discapacidad en el centro de la organización, la participación y el disfrute.
Uno de los implicados en esta aventura es Antonio Haldón, padre de uno de los residentes y estrecho colaborador del evento. “Soy aficionado a la fotografía”, cuenta, y por eso se encarga de capturar los momentos más emotivos del día. “Hago fotos, vídeos y montajes que luego cedo a la residencia. Normalmente se publican en redes sociales y tienen mucha difusión”, explica.
La feria, según detalla, trasciende lo lúdico. No es solo un evento festivo, sino una reivindicación de que la discapacidad no limita la capacidad de crear, organizar y emocionar. En ediciones anteriores, la cita ha llegado a duplicar la población de Chucena, atrayendo visitantes de toda la provincia, de Sevilla e incluso de comunidades como Castilla-La Mancha. “Un padre vino desde allí con su hija, vestidos para la ocasión, expresamente para vivir la feria”, recuerda Haldón.
La responsable de esta iniciativa es Eva Cárdenas, directora de la residencia y apasionada del mundo medieval. “Es una máquina”, afirma Antonio. “Le encanta este mundo y ha sabido trasladarlo a la residencia con un enfoque completamente inclusivo”. La feria está concebida, según destaca, como la primera feria medieval de España pensada para personas con discapacidad.
En su preparación participan los usuarios de la residencia, el personal educativo y numerosos voluntarios. “Todo es sin ánimo de lucro”, puntualiza Aldón. “Los artistas, artesanos y expositores colaboran de manera desinteresada”. Su hijo, que tiene una discapacidad intelectual, también se involucra: “Él sabe que ese día es especial. Aunque no lo exprese como otros, lo vive y lo disfruta a su manera”.
Más allá del plano personal, Antonio destaca la dimensión familiar y comunitaria del evento. “Ese día va toda mi familia: hermanas, sobrinas... Es una excusa más para reunirnos y compartir”, explica.
La feria también se convierte en un escaparate para reivindicar una mayor visibilidad y compromiso institucional con el mundo de la discapacidad. “Ese día vienen políticos y representantes de Bienestar Social. Les interesa mucho estar, aunque luego no estén a la altura”, lamenta. En su caso, su experiencia personal le ha dado una mirada profunda sobre las carencias del sistema, especialmente en salud mental. Su hijo, Jorge, llegó a la residencia en silla de ruedas, y gracias al trabajo conjunto del personal del centro y una de las psiquiatras que allí trabaja, hoy ha recuperado autonomía y calidad de vida. “Si pudiera, a esa doctora le compraría lo que me pidiera”, afirma con emoción.
Con la cámara como aliada, Antonio busca captar no solo imágenes, sino emociones. “Como convivo con esto en casa, tengo otra sensibilidad”, confiesa. “Veo cómo lo viven los usuarios, cómo disfrutan, y eso me llega al alma”. Según asegura, tiene fotos y vídeos que “ponen los pelos de punta”.
Este sábado, quienes se acerquen a Chucena podrán disfrutar de una completa programación: actuaciones de danza del vientre, teatro, música, puestos de artesanía, gastronomía local, vino del terreno, churros, rosquitos y mucho más. Antonio defiende con orgullo los productos locales: “El vino de Chucena es una maravilla que no valoramos lo suficiente. Tenemos un tesoro aquí y no lo sabemos”.
Él estará allí desde las 9:30 de la mañana, cámara en mano, para no perderse ni un detalle. “Invito a todo el mundo a venir. Esta feria es mucho más que un evento: es una experiencia de inclusión real y una lección de vida que emociona”, concluye.