Una mirada al Rocío
José María Núñez Bravo: "En El Rocío te sigues reencontrando con la pureza"
La moda flamenca, como diseñador, y la música, siendo compositor e inspirador de coros rocieros, conducen siempre a este creador jerezano hacia la Virgen: "Ella es punto y aparte"
Jerez - Publicado el - Actualizado
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Su sencillez le delata: es rociero cabal, de Camino en su día, de Aldea actualmente, de corazón siempre. José María Núñez Bravo era aquel chaval que canturreba permanentemente, el que fraguó en inconfundible voz para el coro de la Real e Ilustre Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Jerez de la Frontera. Su actividad compositora y su inspiración posterior de coros como 'Al Alba' darían continuidad a su gusto musical. Luego tuvo la fortuna de sumar, a esa actividad, un segundo pilar que lo une también a la Romería de Pentecostés: la dedicación profesional a la creación de moda flamenca. En 2006 llegaría a ser el pregonero de los rocieros jerezanos en la Bodega de la Concha.
"La fe es la que nos une para hacer el Camino como peregrinación que es", reconoce. Últimamente no puede hacerlo pero no falta en la Aldea almonteña. "Se vive en familia, se vive en reunión, se vive en hermandad y el centro es siempre el Simpecado y la fe en María Santísima del Rocío" admite satisfecho y convencido que "te sigues reencontrando con la pureza". Habla José María de "raíces y tradiciones que, tanto en Almonte como en cada hermandad se conservan" desde "el sello y costumbres de cada una, ésas no se pierden ni se deben perder". "El Rocío es un atractivo a todos los niveles, para el que tiene fe como para el que no la tiene, al que le gusta Andalucía y al que no", afirma.
"Es un espectáculo", concluye contundente advirtiendo que "nosotros lo tenemos mamado desde pequeños pero, para el que viene de fuera, un poblacho en medio de un arenal con una ermita, con esa imagen, esa procesión, las mujeres vestidas de flamenca, nada de tracción mecánica, coches de caballos, con burros, caballos a la monta... Tiene cabida para todo el mundo, tanto para amigos como para gente que llega nueva y se quedan absortos". Su apasionamiento por todo lo rociero es tan significativo como la vehemencia y entusiasmo con los que lo cuenta. No te pierdas la entrevista que puedes escuchar aquí mismo.
Amigo del buen yantar, entra al trapo cuando de la gastronomía en El Rocío se refiere: "Depende mucho del tiempo que te coja, porque si es un tiempo más frío te apetece una buena berza o unos chocos con papas y hay rocíos de calor que se tira más de los salmorejos o de las ensaladas". "Es que hay hermandades para las que la Romería es díez, once o catorce días y hay que hacer el planteamiento de una casa de familia, lo cierto es que se come estupendamente en El Rocío, y se tapea mejor que se come", añade antes de que entremos en sus dos grandes pasiones, ambas con proyección en la cita romera.
Sobre la moda flamenca lo tiene claro: "El Rocío da tal abanico de colores que no hace falta otra inspiración, tenemos la suerte de que nuestro traje de flamenca, nuestro traje regional, aunque evolucione siempre está ahí". Y, con todo, esas posibilidades de evolución le admiran: "Todos los años, tanto en Simof como la Pasarela Flamenca de Jerez, se presentan cuatro o cinco mil modelos de trajes de flamenca". Y de lo que se lleva este año indica "que se vuelvan a mirarte, sin perder la raíz y el matiz; en nuestra marca Jonubra por ejemplo somos muy clásicos: nos gusta el hueso o el coral en complementos y tonos tierra, dulces, malvas, morados, cardenales, celestones azafata... tonos elegantones en los trajes".
El otro pilar, la música: "Aparte de que cantes cosas propias, todavía me llena más de orgullo cuando pasas por cualquier reunión y escuchas a alguien cantando cosas mías". Tiene poco grabado, y como solista nada, pero lo hecho ahí está, "es una forma de manifestación de la fe". Sobre el escenario de la Bodega de la Concha, tuvo a su cargo en 2006 el Pregón del Rocío de Jerez en el que, junto a su prosa y sus versos, no faltaron los cantes que, de producción propia, caracterizan su labor creadora tan presente en mil y una actuaciones en directo. Su mirada al Rocío es muy especial, particularmente fervorosa e impulsora de su amplia y variada labor creativa.
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