Belsué, el último aragonés que jugó en una Eurocopa con España

En el año 96, el lateral derecho del Real Zaragoza se enfrentó contra Inglaterra en unos cuartos de final que supusieron la eliminación de 'La Roja' en penaltis. Él marcó el suyo

Alberto Belsué

Álvaro Montaner

Zaragoza - Publicado el

2 min lectura

Más de medio país está mordiéndose las uñas con la cita de esta noche. España se cita con la historia para jugar de nuevo una final de la Eurocopa. Lo hará contra Inglaterra. En juego, el que podría ser el cuarto trofeo en este torneo para la selección de Luis de la Fuente. Pero muchos años antes, 'La Roja' ya jugó contra el país británico y la suerte no estuvo de su lado.

En la Euro del año 96, la selección española se plantó en cuartos de final. Y en ese equipo tenía un gran protagonismo el hoy delegado del Real Zaragoza y, por aquel entonces, uno de sus jugadores titulares. Alberto Belsué, incombustible lateral derecho, era uno de los fijos para Javier Clemente, el seleccionador por aquel entonces.

El partido llegó al final de los 90 minutos con empate sin goles, lo cual lo llevó inevitablemente a la prórroga. En esa prórroga, el aragonés continuó sobre el terreno de juego. Condicionado, por cierto, desde el minuto 40 de la primera parte, cuando vio una tarjeta amarilla. Aún así, el aragonés aguantó todo el partido hasta llegar a la tanda de penaltis.

Duelo ante Seaman

Terminados los 120 minutos de partido, el encuentro que se disputó en Wembley se marchó hasta los penaltis. Comenzó Inglaterra marcando por medio de Shearer, mientras que después siguió España. Hierro marraba su primer lanzamiento dejando a los ingleses con ventaja demasiado pronto. Su lanzamiento batía a Seaman (guardameta inglés al que Nayim conoce bien) pero se estrelló en el larguero.

Platt marcó el segundo de Inglaterra, mientras que Amor marcaba el primer de España. Pearce volvía a poner por delante a los británicos, con una celebración de locura, y después le llegó el turno a Belsué. Con nervios de acero, el aragonés tomó carrera rápida y sin pensarlo demasiado le pegó con el interior ligeramente a la izquierda de Seaman, que se venció a la derecha. Poco ortodoxo, no fue el mejor lanzamiento del mundo. Pero fue gol y eso es lo que queda para el recuerdo.

Lo demás ya es historia. Gascoigne marcaba el cuarto para Inglaterra obligando más aún a España. Y Nadal volvía a fallar para los españoles, dejando fuera de la Euro al equipo de Javier Clemente. Belsué cumplió con su trabajo. Marcó. Esta noche, esperemos que España no sufra tanto y pueda levantar su cuarta Eurocopa sin necesidad de echar mano al desfibrilador.

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