El jurado declara culpable al acusado de asesinar al dueño de una inmobiliaria en Gijón: entre 18 y 20 años de cárcel

No había mucho margen. El acusado de matar, de dos puñaladas, al dueño de una inmobiliaria de Gijón, a las puertas del negocio, en el barrio de El Coto, en septiembre de 2023, había confesado los hechos -ante los agentes de la Policía que le detuvieron y en sede judicial-; pero el jurado popular del juicio por el crimen lo han confirmado: le han declarado culpable.

En la lectura del veredicto, en la Audiencia Provincial, el jurado ha apreciado que se aplique la atenuante de confesión solicitada por la defensa; pero no las otras dos: obcecación y reparación del daño; ya que el acusado solo ha consignado 250 euros de los 900.000 que se le reclaman.

El fallo del jurado no ha dejado contenta ni a la defensa ni a la acusación particular, que ejerce la familia del fallecido, y que valora recurrir. Su abogado, Eloy Fernández, ha explicado tras la vista que "no es al 100% lo que solicitábamos; nosotros entendemos que, jurídicamente, no cabe la atenuante de confesión; pero el jurado lo argumenta, por lo que es difícil de recurrir". 

Una pena de prisión de entre 18 y 20 años

La abogada defensora, por su parte, explica que "el escrito de acusación estaba hecho en los primeros días de marzo", por lo que, asegura, "prácticamente, no hubo ninguna investigación; y la única que hubo fue para tratar de recopilación de  no hubo investigación y la única fue para tratar de recopilar toda la información necesaria a efectos de la obsesión y la documentación que tenía Felipe (el acusado) en su habitación" del piso compartido en el que residía, ha explicado María Escanciano.

Tras la lectura del veredicto en la sala, el acusado ha vuelto a pedir perdón a la familia de la víctima; y, aunque ha aceptado la decisión del jurado popular, ha puntualizado que no vieron los hechos como los ve él. El juez ahora deberá dictar la pena que le impone: la Fiscalía solicita 18 años de prisión; y la acusación particular eleva la petición hasta los 20.

Un crédito con elevados intereses, el móvil del crimen

Los hechos juzgados se remontan a 2023, cuando el asesino asaltó a la víctima, a las puertas del negocio inmobiliario que regentaba en El Coto, porque, según la versión del atacante, le había "arruinado la vida". El motivo era un crédito que había solicitado la mujer del procesado, y que había tenido unos elevados intereses.

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Como consecuencia, el hombre se habría separado de su esposa y perdido el piso en el que convivían. Además, sospechaba que la mujer y el fallecido mantenían una relación sentimental; algo que ella negó en su declaración ante el juez. Sí confirmó que pidió un crédito y que se lo ocultó al que, entonces, era su marido. 

Un crédito que, según declaró, se le concedió mediante "engaños" y siendo obligada a firmar un papel en blanco. El préstamo, de 3.500 euros, se transformó en 12.900; y acabaron pagando, por él, más de 40.000 euros.