Caja Rural de Asturias dona 250 equipos informáticos para estudiantes

La Fundación Caja Rural de Asturias ha entregado hoy 150 portátiles nuevos y un centenar de ordenadores de sobremesa procedentes de sus oficinas, en perfecto estado y preparados para un nuevo uso. La práctica totalidad de esta partida de equipos informáticos tendrá como destino el alumnado de la zona rural que carezca de dispositivos.

Igual de importante ha sido la respuesta de la ciudadanía a esta campaña, que persigue aprovechar y reutilizar dispositivos ya usados. Así, 125 particulares han contactado con la Dirección General de Innovación, Investigación y Transformación Digital para donar 210 equipos, en su mayor parte ordenadores de sobremesa, portátiles y tabletas. A partir de la próxima semana, se establecerá la vía de entrega de este material para su revisión por parte de voluntarios de los colegios profesionales de ingenieros informáticos del Principado (CITIPA y COIIPA) y su posterior reparto entre escolares.

A estos equipos se añaden otros 40 ordenadores de sobremesa donados por Sodeco, 30 procedentes de ArcelorMittal, 25 de La Eléctrica, 22 del Instituto Técnico del Cantábrico (ITC), una decena de portátiles del Centro Impulsa de Gijón, cinco ordenadores de sobremesa de la empresa Altabox y 15 tabletas de Imaginarium.

Esta campaña persigue reforzar las iniciativas ya emprendidas por la Consejería de Educación para dotar de equipos informáticos al alumnado, especialmente de Bachillerato, Formación Profesional (FP) y cursos de fin de ciclo (4º de ESO y 6º de Primaria), que carece de medios para continuar de forma telemática con el curso escolar.

En total, más de un centenar de particulares, instituciones y empresas han donado equipos informáticos al Principado para que sean distribuidos entre el alumnado que no dispone de los dispositivos tecnológicos necesarios para seguir el curso de forma no presencial. La campaña iniciada por la Consejería de Ciencia, Innovación y Universidad ha logrado reunir 600 ordenadores y tabletas que ayudarán a mitigar la brecha digital y se destinarán principalmente a la zona rural y a las familias con menos recursos económicos.