María, una asturiana de 82 años, pone voz a la soledad no deseada: "Estoy solina y tengo miedo"

María es una mujer asturiana que, en marzo, cumplirá 83 años y pasa los días sola en su domicilio. Es un claro caso de esa "soledad no deseada" que sufren muchos de nuestros mayores.

María ha contado en COPE Asturias que trabajó "mucho, hasta los 70 años", pero que está "muy enferma, con un 70% de minusvalía". Además, está sola porque sus hijos se han marchado fuera y solo cuenta con el servicio de ayuda a domicilio. "Son muy buenas, me lo hacen todo. Esto es una delicia, pero estoy sola. A veces tengo miedo hasta de que se haga de noche. Yo no tengo otra vida, estoy muy inútil y puedo caerme", lamenta.

María, que utiliza muletas para moverse por casa, confiesa que siente envidia cuando se asoma a la ventana y ve, en el parque que hay al lado de su domicilio, "a los padres que llevan a sus hijos y a los hijos que llevan a sus padres. ¡Qué hijos más buenos, -exclama- pero yo estoy sola y esto es una tristeza muy grande!”.

María lo tiene claro: “No hay mejor cosa que la compañía. Habrá gente que tiene mucha salud, pero con los años la soledad es lo más triste. Cierras la puerta de noche, empiezas a acordarte de todo, de que estás sola. Cualquier día no llego a por la mañana, pero es igual, porque como no tengo a nadie, qué más da”, ha contado.

El de María no es un caso único. Según los últimos datos que facilita el INE, en Asturias hay 42.709 hogares unipersonales. 80.863 personas tienen más de 60 años y de ellas 56.892 son mujeres.