El novedoso invento de unos investigadores de Asturias para evitar el contagio de los animales... y el coste es asequible

Los abrevaderos donde los animales sacian su sed pueden convertirse en una zona de contagio porque resulta complicado llevar a cabo los procesos de limpieza y desinfección con la eficacia y periodicidad necesaria. La solución que han encontrado varios investigadores de Asturias es colocar sobre la superficie de los bebederos un material inorgánico que inhiba el crecimiento de microorganismos. En ese material lleva tiempo trabajando el Centro de Investigación en Nanomateriales y Nanotecnología (CINN-CSIC) que ha comprobado su efectividad en el laboratorio y ahora la va a comprobar en las explotaciones ganaderas de la mano de la Asociación de Investigación de Industrias de la Carne (ASINCAR) y la Asociación de Criadores de Raza Asturiana de los Valles (ASEAVA).

ENSAYO CON ANIMALES

El desarrollo del prototipo de bebedero capaz de limitar la proliferación de microorganismos y reducir el contagio de enfermedades entre el ganado se encuentra próximo a ser validado. Tras los resultados óptimos en el laboratorio, ahora los investigadores van a monitorizar durante varios meses el estado de salud de los animales que beban en los abrevaderos con superficie inorgánica y la carga de bacterias que detectan en esos bebederos y también en el agua. Si el ensayo resulta exitoso, el siguiente paso será fabricarlos para que puedan ser adquiridos por los ganaderos.

COSTE ASEQUIBLE

Armando Menéndez, técnico de ASINCAR, ha explicado en COPE que la idea de la que ha partido la investigación es que el coste del 'bebedero anticontagios' pueda tener un coste “asequible” para que su implementación a nivel industrial pueda ser sencilla.

El proyecto, que está cofinanciado la Unión Europea a través de fondos FEADER, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Consejería de Medio Rural y Política Agraria, tiene un presupuesto total de 139.010 euros y una ayuda pública de 125.887 euros.