Multitudinaria despedida a Olivia, la niña presuntamente asesinada por su madre en Gijón: "es una salvajada"
La madre continúa en los calabozos de la Policía Nacional en Gijón, el padre de la niña estudia pedir para ella prisión permanente revisable
Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
La localidad segoviana de Torrecaballeros ha arropado este martes a Eugenio García, el padre de Olivia, la niña de seis años cuyo cadáver fue hallado en la cama de un piso de Gijón junto a su madre, ahora detenida, y ha guardado cinco minutos de respetuoso silencio en un acto celebrado en la Plaza Mayor que ha acabado con un aplauso en memoria de la pequeña, "la pirata que enredaba por todos los lados", como ha rememorado su padre, y que estaba vinculada a este pueblo de su familia paterna cuyos abuelos residen en el pueblo.
Los vecinos de Torrecaballeros, entre los que se encontraba el alcalde, Rubén García, han portado algunas fotos de la niña y han acompañado a los amigos y a los familiares de Olivia, entre los que se encontraban, además del padre, una prima y una tía de la menor y la pareja del progenitor que ha rememorado el "poquito tiempo" que ha podido pasar con su hija y a la que ha recordado como "una disfrutona nata".
"Pobrecita, pobrecita no supimos verlo", ha exclamado el padre que ha explicado que el homenaje de este martes iba por su hija. "Ya habrá tiempo para más cosas", ha añadido como ha compartido el abogado de la familia paterna en un día "de muchas emociones" para una "familia desolada" y para la que ha pedido respeto a estos momentos de dolor con el reto de que se pueda evitar cualquier cosa parecida a este caso.
Varios peluches y un ramo de flores blancas han servido también para recordar y para querer a esta niña de seis años a la que Torrecaballeros despidió con un funeral que tenía lugar en la Iglesia de San Nicolás de Bari en una "vuelta a casa", en palabras del padre, que ha reconocido que no era la manera que había imaginado hace unos días. "Se va a quedar siempre con nosotros", ha afirmado entre sollozos tras lo que ha sido interrumpido por los vecinos entre aplausos de apoyo.
Acto seguido y tras recuperar la voz, Eugenio García ha exclamado que un padre no debe enterrar a sus hijos porque "no es natural" y ha recordado que el deber de una madre es cuidar de sus hijos y ha pedido que una "salvajada" como la muerte de Olivia "no puede volver a pasar esto".
"No tiene sentido ¿por qué ha muerto Olivia? El odio no lleva a ningún lado, no vamos a ningún lado con el odio", ha concluido, solicitando apartar a "esta gente" --en alusión a la madre de Olivia-- de la sociedad y de las personas de bien. La familia estaría estudiando solicitar para ella la pena de prisión permanente revisable.
Eugenio había conseguido la custodia de su hija el pasado viernes, tras una larga batalla judicial, en las que su exmujer. Noemi Martínez, de 48 años, había intentado de todo para apartarle de la pequeña.
Hasta 28 denuncias, todas desestimadas por la justicia, llegó a presentar Noemí, que incluso se llevó a la niña en dos ocasiones. Tras perder la custodia, incluso habría asegurado a su hermano que “antes de dejarla con el padre, la mato”.
Fue su hermano, precisamente, el que avisó a la Policía el domingo por la noche al no conseguir hablar con ella. Cuando la policía consiguió entrar en el piso ya era tarde, la niña ya estaba muerta. Su madre le había suministrado, presuntamente, una sobredosis de tranquilizantes en una taza de cacao con leche.
La investigación sigue abierta y la madre, tras pasar, en un primer momento por el Hospital de Jove, ya que dijo haber consumido también pastillas, continúa detenida en las dependencias de la Policía Nacional en Gijón, a la espera de pasar a disposición judicial.