Canarias consigue controlar al mosquito tigre: "Es una de las pocas zonas del mundo que lo ha logrado"

Seguro que has oído hablar del mosquito tigre: unos pequeños insectos de color negro de estrechas alas y rayas blancas. Son conocidos en todo el mundo por sus picaduras, pero sobre todo por ser propagadores de graves enfermedades como el dengue, la malaria o el zika. Proviene del sudeste asiático y ya revolotea por muchos países. Desde principios de los 2000 ya se ha detectado su presencia en Francia, Italia y en España. Si hablamos de la historia reciente de Canarias, tan solo hace 18 meses que se localizaron estas especies en un vivero en el municipio tinerfeño de Tacoronte. 

un trabajo duro

La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, en trabajos conjuntos con el Sistema Autonómico de Vigilancia, anuncian que este foco ya ha desaparecido. Esto ha sido posible gracias a trampas en Tacoronte, en los puertos y aeropuertos. José Díaz-Flores, director general de Salud Pública del Gobierno de Canarias, explicó el panorama actual en lo que respecta a este mosquito: "Estos días ya hemos cerrado la de Tacoronte y tenemos otras en Tenerife, tanto en puertos y aeropuertos, como es el caso de Vuelta a los Pájaros". 

En estos meses ya no hemos encontrado mosquitos, igual nos ocurre en Gran Canaria

José Díaz-Flores

Director General Salud Pública Gobierno de Canarias

La otra isla capitalina también celebra esta noticia: "En todos estos meses ya no hemos encontrado mosquitos, igual nos ocurre en Gran Canaria, en el barrio de Piletas y en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria". Díaz-Flores explica que lograr este nivel de control es muy difícil pero que Canarias es una de las pocas zonas en el mundo que lo ha logrado: "El problema es que es transmisor de enfermedades como el dengue, el chikunguña, el zika...". Pone el ejemplo de Sudamérica y Asia, que está desolando millones de afectados. 

En cuanto a los diferentes tratamientos para acabar con este insecto, el director aclara que se utilizan trampas: "Una vez que se hace una detección, lo primero es controlar los puntos de cría, que es lo más importante, porque pueden haber 4 o 5 adultos que pueden generar nuevas crías, huevas y larvas que producen muchísimos mosquitos". La fumigación específica en estas zonas es clave para evitar que se expandan: "Nos pasó en el barrio de Piletas, nos pasó también en el barrio de Vuelta a los Pájaros en lo que tuvimos que hacer una atención integral de cientos de casas. Y costó". 

ni rastro de los mosquitos

Por el momento, Díaz-Flores comenta que la única zona que todavía les preocupa es precisamente el barrio de Piletas en Las Palmas de Gran Canaria aunque confiesa que llevan unas semanas donde ya no encuentran nuevos mosquitos en las trampas: "En la parte externa de la ciudad, hay mucha vegetación, muchas zonas de cría, que complica aún más el que en un momento dado se puedan estar haciendo limpiezas y las fumigaciones para eliminar el mosquito".

Para quienes se preguntan cómo llegaron estos bichos a nuestras Islas la respuesta es clara: "Evidentemente, volando es imposible", ríe Díaz-Flores. "Solamente lo pueden hacer en barcos y en aviones. En aviones es más complicado y casi todas las detecciones que hemos tenido las asociamos sobre todo a entradas de buques, en buques por mercancía". El director pone el ejemplo de un cargamento de flores llegado de Holanda, o en el caso del vivero de Tacoronte, unos bambús que habían introducido desde Asia donde el mosquito venía en la tierra con las larvas.