La patronal hotelera, ante el impacto exterior de las manifestaciones: “Competimos con países que pagan 300 dólares a sus empleados. En Canarias no queremos eso”

Siempre es interesante escuchar al presidente de la patronal hotelera de Santa Cruz de Tenerife (ASHOTEL), Jorge Marichal, y más cuando habla en COPE en la previa de uno de los congresos turísticos más importantes de España: Futurismo. Marichal ha analizado varios aspectos de la actualidad turística y económica no dejando indiferente a nadie y poniendo el ojo en la situación y el nicho que ocupa Canarias como destino líder en el mercado turístico. Aun así, asume que no debemos dormirnos, porque muchos países están al acecho.

Marichal ha puesto dos ejemplos: Egipto y República Dominicana. Ha indicado que las protestas masivas del año pasado en contra del modelo turístico fueron muy lesivas para nuestra imagen internacional, porque partimos en desventaja: “Hasta cuánto vamos a poder subir los sueldos para que el sector turístico de Canarias no pierda la competitividad que tiene y los turistas en vez de venir aquí se nos vayan a otro sitio donde no es que vivan en caravanas, es que viven en chozas y que cobran 300 dólares al mes y vaya usted a cualquier destino competidor como por ejemplo Egipto o como República Dominicana. Los sueldos son 300 dólares, trabajan 26 días y libran 4 y viven en chabolas de chapa cerca de los hoteles. Entonces, sinceramente yo es que no sé qué la gente está pensando”.

Marichal ha aclarado que él no quiere esas condiciones para los trabajadores del sector turístico en Canarias: “Aquí somos un destino turístico que ya quisieran todos parecerse a nosotros también en el ámbito social, pero lo que está claro es que hay un déficit de infraestructuras sobre todo en la isla de Tenerife en los últimos 20 años que hay que arreglar pero a marchas forzadas”.

REACCIÓN A LA HUELGA

Jorge Marichal fue uno de los agentes protagonistas en la negociación para evitar, la semana pasada, la huelga en la hostelería durante Jueves y Viernes Santo. Finalmente, la oferta de un incremento salarial del 6% no fue aprobada por la mesa sindical, y los trabajadores pararon. El presidente de ASHOTEL ha reflexionado sobre ello y ha presentado su voluntad de seguir hablando: “Hay que reflexionar sobre esto, ese folio en blanco por todas las partes. Sentarnos y ver que el acuerdo que se había planteado no era un mal acuerdo. Por lo tanto, mayor disposición a negociar ninguna, con todas las ganas, pero también para hablar de los problemas, como dijimos al principio de las manifestaciones o en los temas de la convocatoria de huelga, de hablar de los temas que tienen importancia en el sector, que no solamente es la pérdida de poder adquisitivo”.