SOCIEDAD
¿Cómo nos afecta a los canarios psicológicamente el cambio al horario de invierno?
Este sábado de madrugada deberemos de nuevo retrasar una hora los relojes, lo que implica cambios de hábito en una comunidad acostumbrada a muchas horas de luz y sol
Tenerife - Publicado el - Actualizado
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Llega el último domingo de octubre, y con él, el eterno debate acerca de la oportunidad de seguir manteniendo el cambio de horario dos veces al año en el ámbito de la Unión Europea. Por el momento todos debemos saber que este próximo sábado 28, a las 3 de la mañana debemos retrasar nuestros relojes a las 2, aunque los avances tecnológicos, han propiciado que ya muchos dispositivos se actualicen automáticamente.
Pero justamente en la frontera sur de Europa, es evidente que los canarios disfrutamos de un modo de vida muy diferente al del territorio continental europeo, debido al clima con suaves temperaturas que disfrutamos todo el año.
Esa benigna climatología, redunda directamente en el carácter abierto de los isleños, y en el número de horas al día que se dedica en las islas a actividades al aire libre con luz natural y a socializar con otras personas. Algo que con este cambio horario, se ve puede ver mermado por los anocheceres prematuros propia de esta época del año.
En ese sentido, el psicólogo Leocadio Martín ha destacado hoy en Herrera en COPE Tenerife que ya en Canarias de entrada, la situación se agrava porque los canarios en general “tenemos poca tolerancia incluso a los cambios de tiempo como hemos visto en las últimas semanas” y esta circunstancia, se añade a que en las islas, “estamos más acostumbrados a unos momentos de luz determinados, y que se esté haciendo de noche a las 6 de la tarde, eso a nosotros no nos cuadra”. Incluso, el psicólogo apunta que “toda esta maraña de cambios e incertidumbres que hemos tenido en los últimos años, nos ha hecho paradójicamente menos resistentes a los cambios y a lo que viene de fuera”.
Las consecuencias, aunque generalmente leves, son claras: “sobre todo se produce cierta grado de irascibilidad, especialmente en personas que trabajan por la tarde y salen de noche de trabajar”. Además, en algunos casos, “se puede producir ansiedad por llegar tarde en los dos tres primeros días, cosa que se acentúa más en los niños”.
POSIBLES SOLUCIONES
¿Cuáles son las soluciones? En opinión del psicólogo, “es muy importante el biorritmo, el reconocer qué es lo que nos está pasando” y a partir de ahí, “hay que intentar buscar el lado positivo de las cosas, y pensar que nos vamos a levantar con más luz y no de noche, lo que es bueno hasta para los que están en la cola de la autopista”.
En cualquier caso, “lo normal es que en dos o tres días se pase, y si dura más, sí convendría visitar a un psicólogo para buscar alguna estrategia para combatirlo”.