SOCIEDAD
La emotiva demostración de solidaridad con los perros afectados por el incendio de Arona
El fuego obligó a la rápida evacuación de 180 canes de dos albergues colindantes, y multitud de personas se presentaron para dar cobijo a los animales en sus casas
Tenerife - Publicado el
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En las situaciones difíciles, siempre sale a relucir lo mejor del ser humano. Lejos de ser un tópico, esta máxima se ha hecho realidad en las últimas horas, con el incendio que continúa activo en una nave de compostaje en la zona de Parque de la Reina, en el municipio de Arona. El fuego se ha declarado en una zona colindante a dos albergues de perros, el Esperanza del Sur, y elLive Post, que dan cobijo a unos 180 perros, y si bien las llamas no han llegado hasta ellos, sí ha sido imperativa la evacuación de estos animales, por el estrés que les causa y la posible inhalación de humos.
En la tarde del jueves, fueron decenas las personas que, de forma desinteresada, y siguiendo el llamamiento realizado a través de los medios de comunicación y redes sociales, se acercaron hasta el lugar, para adoptar de manera temporal a estos canes. De forma improvisada se tomó registro de cada perro, y en un ejercicio de solidaridad colectiva fueron muchos los particulares, que optaron por colaborar y ofrecer un hogar temporal a estos perros.
Una de esas personas fue Isabel, que ha confesado en Herrera en COPE Tenerife que, “todo fue una locura, porque hasta mi chico fue levantando a los perros uno por uno en brazos para poder sacarlos de allí”.
“Los perros estaban traumatizados por las explosiones, fue un caos”
Hay que tener en cuenta, que los perros, “estaban traumatizados por el miedo, ya que había explosiones, y en un momento, me vi con seis correas en la mano intentando sacarlos de allí”. Isabel relata que “todo el mundo corría por la finca para sacarlos de allí, fue un caos total”, explica que, “algún animal estaba tan estresado, que fue imposible sacarlo de allí”.
Pero lo realmente importante, “es que había mucha gente dispuesta a llevarse los perros, y también personas de otras protectoras que estaban dispuestas a acoger a los perros”. Así las cosas, nuestra protagonista confiesa que, “fue muy bonito ver ese movimiento y ver que había mucha gente que estaba dispuesta a ayudar”.