El descendimiento del Cristo de la Misericordia, preludio de la Semana Santa en el Realejo Alto

El Cristo de la Misericordia del Realejo Alto ya se prepara para la Semana Santa. La imagen fue descendida de su retablo en la Parroquia Matriz del Apóstol Santiago este 16 de marzo, como cada sábado anterior al Domingo V de Cuaresma o Domingo de Pasión.

Seis hermanos de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Vera Cruz, Sangre y Misericordia fueron los encargados de bajar la talla del retablo, ubicado en la nave de la Epístola, para posteriormente trasladarlo en procesión por el interior del templo hasta el presbiterio.

Tras la Eucaristía, en la que impuso la medalla de la Cofradía a los nuevos hermanos, tuvo lugar la veneración del Cristo y la colocación en su cruz procesional, el Santo Madero que en menos de dos meses copará todas las miradas en las Fiestas de Mayo, con el pique pirotécnico entre las calles El Sol y El Medio.

De momento, la cruz cumple su función en Semana Santa de acoger al Cristo de la Misericordia, una valiosa talla del siglo XVII con una curiosa historia de trasiegos. Y es que la imagen procede de la Parroquia de San Francisco de Asís de Las Palmas de Gran Canaria. Allí, en la capilla de la portería el convento, recibió culto hasta la desamortización ocurrida en el siglo XIX.

Fue el lagunero Manuel Fragoso quien pidió al obispo de la Diócesis de Canarias Judas Tadeo José Romo y Gamboa llevar la imagen para restituirla al culto, en este caso, en el Realejo Alto. En 1846, el Cristo llegaba a la Parroquia del Apóstol Santiago. Ha sido intervenido dos veces a lo largo del siglo XX, primero por Nicolás Perdigón y después por Ezequiel de León.

Viernes Santo de madrugada

El Cristo de la Misericordia saldrá en procesión la próxima madrugada del Viernes Santo, a las 5 de la mañana, hasta el Calvario de San Benito. Regresará pasado el mediodía a la Parroquia Matriz, en la procesión de retorno del Encuentro. Ese mismo día volverá a salir en la Procesión Magna del Santo Entierro, a las 10 de la noche.