Los rescatadores de rótulos velan por la historia de pueblos y ciudades
En Santander, a pesar del incendio, hay auténticas joyas que habría que conservar
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La Red de Patrimonio Gráfico se creo oficialmente a principios de este año, pero ya desde tiempo atrás trabajaba en documentar gráficamente la rotulación de la calle. Una exposición en Madrid sirvió como punto de encuentro de todos los voluntarios repartidos por diferentes zonas de España que comparten ese mismo objetivo.
Santander vivió el incendio de 1941 que destrozó todo el casco histórico con lo que mucho comercio tradicional desapareció y con ello toda esa riqueza gráfica. Sin embargo se conservan auténticas joyas, según relata Federico Barrera miembro de la Red en Cantabria “ hay una pequeña mercería que todavía conserva el rótulo de los años 50 hecho en cristal de forma artesanal obra de Luminosos Noval”
Desde hace tiempo todas las ciudades, todas las calles comerciales de cualquier ciudad son iguales: mismas marcas, mismos logotipos. El pequeño comercio local, tradicional era el que dotaba de esa riqueza visual a las calles de pueblos y ciudades.”La calidad del rótulo muchas veces no importa porque del rótulo trasciende la historia del local. Es la micro historia de gente de barrio que hay detrás de cada letrero lo verdaderamente importante”, cuenta en esta entrevista Federico.
Con la recuperación del patrimonio gráfico, lo que la Red pretende también es recuperar esa historia de esas anécdotas, de curiosidades.Recuperar la memoria que se esconde detrás de cada cartel comercial.
La Red lleva ya unos años recogiendo rótulos que de momento se guardan en una nave en Toledo con el objetivo de crear un espacio expositivo. En Cantabria, Federico Barrera lleva desde hace año y medio recopilando rótulos y carteles que documenta y guarda en su trastero. Su última adquisición han sido las letras de la joyería Salamanca. “Fue la propia familia la que se puso en contacto conmigo que hasta me facilitó la factura del encargo: Mil seiscientas pesetas de 1948”
Federico Barrera pasea con los ojos bien abiertos al rescate de todo aquel rótulo que esconda una historia “el cartel puede ser original, pero aunque este restaurado, si guarda una historia siempre será interesante".