Así es la situación el plan urbanístico de Ribamontán al Mar, todo empieza en 2020: "Es inevitable"

En Ribamontán al Mar, la tensión por la especulación inmobiliaria ha alcanzado su punto álgido. El pasado sábado, alrededor de 3.000 personas se reunieron en Loredo y Langre para protestar contra los planes de desarrollo urbanístico que, según los manifestantes, amenazan el patrimonio y la calidad de vida del municipio. Entre los asistentes, muchos eran jóvenes preocupados por su futuro en la localidad, como María, vecina del municipio, quien expresó su temor de que la especulación inmobiliaria impida a las nuevas generaciones establecerse en la zona.

Por otro lado, residentes de toda la vida como Julio, quien ha vivido en Ribamontán al Mar durante décadas, observan los cambios con una perspectiva diferente. Julio reconoce que la llegada del turismo ha transformado el área significativamente y sostiene que la construcción de nuevas viviendas puede ser beneficiosa, comparándolo con "no poder poner diques al mar".

La controversia actual tiene sus raíces en la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Ribamontán al Mar en 2020. Este documento estipula la construcción de un campo de golf de 630.225 metros cuadrados y hasta 164 viviendas en los terrenos en cuestión. La situación se complicó cuando un promotor balear se presentó a la subasta de estos terrenos con la intención de convertir Loredo y Langre en "la Ibiza del Norte". Aunque finalmente no ganó la subasta, sus declaraciones encendieron las alarmas entre los residentes y activistas locales.

Hasta el momento se desconoce la identidad del ganador de la subasta. Este promotor tendrá la libertad de construir según lo estipulado en el PGOU, pero no podrá desarrollar el campo de golf debido a que no ha adquirido suficiente terreno para ello, tal y como trasladan fuentes del Gobierno de Cantabria.

El alcalde de Ribamontán al Mar, Francisco Asón, enfatizó hace cuatro años que el campo de golf estaba incluido en el plan, pero su realización dependía de la iniciativa privada, mencionando que solo se llevaría a cabo "si hay algún valiente que se atreva". La falta de terrenos suficientes para el campo de golf deja en el aire las verdaderas intenciones del promotor anónimo que ganó la subasta, alimentando la incertidumbre y la especulación entre los vecinos.

La concentración del sábado reflejó un fuerte rechazo a lo que muchos consideran un intento de transformar la identidad de Loredo y Langre. Los manifestantes, portando pancartas y coreando consignas, recorrieron las calles en una demostración de unidad y defensa de su patrimonio. "No queremos que nuestro hogar se convierta en una atracción turística más, perdiendo lo que lo hace especial", comentó María, una joven participante en la protesta.

Julio, sin embargo, plantea una visión pragmática: "Es inevitable que la zona cambie. El turismo trae desarrollo y oportunidades. Lo importante es gestionar ese crecimiento de manera sostenible". Su postura resalta una división en la comunidad, donde algunos ven en la urbanización una amenaza, mientras otros la consideran una oportunidad para el progreso económico.

El PGOU de 2020 ha sido objeto de debate desde su aprobación, pero los recientes eventos han avivado el fuego de la polémica. La incertidumbre sobre quién llevará adelante los proyectos y qué tipo de desarrollo se permitirá sigue siendo una cuestión central. Los vecinos exigen transparencia y participación en las decisiones que afectarán el futuro de Ribamontán al Mar.

Mientras tanto, la comunidad permanece en vilo, esperando más información sobre los planes del promotor ganador y cómo estos afectarán su entorno. La polémica en Ribamontán al Mar refleja una lucha más amplia entre desarrollo y conservación, un dilema común en muchas localidades que enfrentan la presión del crecimiento urbano y turístico. La historia de Loredo y Langre es, en última instancia, un testimonio de la búsqueda de equilibrio entre el progreso y la preservación de la identidad local.

¿Es rentable construir un campo de golf en Ribamontán al Mar?

La rentabilidad de construir un campo de golf en la costa de Cantabria, específicamente en el municipio de Ribamontán al Mar, depende de varios factores que deben considerarse detalladamente:

1. Demanda Turística y Local

Turismo Deportivo: Cantabria es una región que atrae a numerosos turistas gracias a sus paisajes naturales y su costa. El turismo deportivo, que incluye el golf, podría ser una extensión natural de la oferta turística existente. Si el campo de golf se promociona adecuadamente, podría atraer tanto a turistas nacionales como internacionales, especialmente aquellos interesados en deportes al aire libre y en destinos menos masificados.

Demanda Local: Es importante evaluar la demanda local. La población residente, así como los veraneantes recurrentes, deben mostrar un interés suficiente en el golf para garantizar una base de usuarios regular.

2. Infraestructura y Accesibilidad

Infraestructura Existente: Ribamontán al Mar debería contar con las infraestructuras adecuadas, como carreteras de fácil acceso, alojamiento de calidad y otros servicios turísticos. La presencia de una infraestructura sólida es crucial para atraer turistas de alto poder adquisitivo que practican golf.

Accesibilidad: La facilidad de acceso al campo de golf desde ciudades principales y aeropuertos cercanos también influye en su rentabilidad. Buenas conexiones de transporte aumentan la probabilidad de visitas frecuentes.

3. Inversión Inicial y Mantenimiento

Costos de Construcción: La construcción de un campo de golf requiere una inversión significativa. Esto incluye la adquisición de terrenos, diseño del campo, construcción de greens y fairways, y la instalación de infraestructura adicional (clubhouse, tiendas, restaurantes, etc.).

Costos de Mantenimiento: El mantenimiento de un campo de golf es costoso. Esto abarca el riego, el cuidado del césped, la contratación de personal especializado y otros gastos operativos. Dada la ubicación costera, el mantenimiento podría ser más desafiante debido a las condiciones climáticas, como la salinidad y la humedad.

4. Regulaciones y Planificación Urbana

Planificación Urbana: Según el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Ribamontán al Mar, existe una delimitación específica para la construcción de un campo de golf de 630.225 metros cuadrados. Cumplir con las regulaciones y obtener los permisos necesarios es crucial y puede ser un proceso largo y costoso.

Impacto Ambiental: La construcción y operación de un campo de golf en una zona costera pueden tener un impacto ambiental significativo. Se deben considerar las medidas de mitigación para preservar la biodiversidad y evitar la degradación del medio ambiente.

5. Competencia y Mercado

Campos de Golf Cercanos: Evaluar la competencia es esencial. Si ya existen varios campos de golf en la región, el nuevo proyecto necesitará una propuesta de valor única para atraer a los golfistas.

Tendencias del Mercado: El mercado del golf ha experimentado fluctuaciones en popularidad. Se debe investigar si hay una tendencia creciente en la práctica del golf en la región y si esta tendencia es sostenible a largo plazo.

6. Potencial Económico y Retorno de Inversión

Ingresos Proyectados: Los ingresos provendrán de las tarifas de membresía, tarifas diarias de uso, torneos, eventos corporativos y otros servicios adicionales (clases, tiendas, restaurantes).

Retorno de Inversión (ROI): Se debe realizar un análisis financiero detallado para proyectar el tiempo necesario para recuperar la inversión inicial y comenzar a generar beneficios. Esto incluye un estudio de mercado, análisis de la competencia, y una estimación de los ingresos y gastos operativos.

Construir un campo de golf en la costa de Cantabria, en Ribamontán al Mar, puede ser rentable si se cumplen varias condiciones:

Un análisis de viabilidad detallado, que incluya estudios de mercado, evaluaciones financieras y consultas con expertos en desarrollo inmobiliario y turismo, es esencial para tomar una decisión informada.