Conoce el motivo por el que Cantabria está perdiendo muchos lectores: "Batalla perdida"

En Cantabria, la lectura es un hábito arraigado en la mayoría de la población, según revela el reciente Barómetro de Hábitos de Lectura y compra de libros en España 2023. Sin embargo, los datos muestran una leve disminución en el último año, situándose en un 62,1 por ciento de la población mayor de 14 años que lee libros en su tiempo libre al menos una vez al trimestre. Aunque esta cifra está por debajo de la media nacional, Cantabria se mantiene por encima de la barrera del 60 por ciento, compartiendo posición con la Comunidad Valenciana, Asturias, Baleares, Castilla y León, y Galicia.

A pesar de la disminución del 0,4 por ciento en el último año, el balance de los últimos once años muestra un crecimiento constante, pasando del 60,5 al 62,1 por ciento. Estos datos reflejan la sólida base de lectores en la región, aunque la atención se centra en el esfuerzo por aumentar el acceso a la lectura entre los cántabros.

A nivel nacional, el índice de lectura en el tiempo libre ha experimentado una ligera caída, pasando del 64,8 al 64,1 por ciento en el último año. Esta tendencia se traduce en más de un tercio de la población que nunca lee, una preocupación que se destaca en el discurso del presidente de la Federación de Gremios de Editores de España, Daniel Fernández.

Fernández destaca la dualidad de la situación actual: aunque la lectura por placer ha aumentado en cinco puntos en los últimos once años, persiste un tercio de la población que nunca se acerca a un libro, una biblioteca o un museo. Este fenómeno, según él, contribuye a las desigualdades sociales y señala un problema educativo en la sociedad española, especialmente en la educación secundaria, donde el impacto de los teléfonos móviles se percibe como una "batalla perdida".

El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha expresado su optimismo sobre la situación en España, afirmando que la lectura está en aumento. Sin embargo, hace hincapié en la necesidad de ir más allá y fomentar el crecimiento de estos índices. Urtasun destaca el apoyo a las librerías independientes y anuncia una inversión de 1,4 millones de euros destinados a entidades locales para actividades de promoción de la lectura. Además, confirma la consolidación de la primera fase del Plan de Lectura 2021-2024.

El ministro subraya que este barómetro no solo es un indicador cultural, sino también un reflejo de la igualdad en todas sus expresiones y de la forma de vida de la sociedad. Las cifras revelan diferencias notables entre comunidades autónomas, géneros y grupos de edad. Desde 2012, se ha observado un crecimiento significativo en los índices de lectura entre los lectores de 65 años o más, aumentando en más de 15 puntos porcentuales hasta el 53,7 por ciento.

Madrid lidera las comunidades autónomas con un impresionante 73,5 por ciento de lectores, seguida de Cataluña (68,2 %), Navarra (68,1 %), País Vasco (67,8 %), La Rioja (66,6 %) y Aragón (64,3 %). Cantabria, junto con otras cinco regiones, se encuentra entre la media nacional y el 60 por ciento, demostrando una sólida base de hábitos lectores en la región.

En cuanto a las diferencias de género, las mujeres superan a los hombres en todos los tramos de edad, destacando una brecha de 17,5 puntos porcentuales entre las edades de 25 y 34 años, donde las mujeres alcanzan un 73,4 por ciento de lectores.

Finalmente, entre las razones esgrimidas por los españoles que no leen, el 40 por ciento señala la falta de tiempo libre como su principal obstáculo, una cifra que aumenta al 54,4 por ciento en la población de 55 a 64 años. El 31,1 por ciento prefiere dedicar su tiempo libre a otros entretenimientos, mientras que el 29,7 por ciento alega falta de interés. Un pequeño porcentaje, el 1,6 por ciento, no lee por motivos de vista o salud.

El Barómetro de Hábitos de Lectura y compra de libros proporciona una visión integral de la lectura en Cantabria y en toda España, destacando logros y desafíos en la promoción de este hábito fundamental para el desarrollo cultural y social.