Un viaje al pasado que se observa en sus ermitas, iglesias o conventos

Situado entre el río Júcar y el Cabriel, en pleno corazón de la Manchuela conquense, se ubica Villanueva de la Jara, uno de los municipios más pintorescos de la provincia por su riqueza patrimonial, cultural y natural.

Una de las visitas obligadas de esta localidad es la imponente Basílica-Fortaleza de finales del XV, en ella, se pueden descubrir numerosos elementos propios de la arquitectura y decoración de los Reyes Católicos. Un guía turístico especializado acompaña a los visitantes para introducirles en un viaje al pasado que se puede observar en sus ermitas, iglesias, conventos o solares castizos embellecidos por fachadas en las que no falta el escudo familiar.

Villanueva de la Jara está integrada en el circuito de las Ciudades Teresanias, formado por 17 localidades en las que la santa levantó fundación. El municipio cuenta con dos casas carmelitas, el convento de Santa Ana, XIII fundación de la santa y el de El Carmen, de frailes descalzos.

Todo esto envuelto por una variada naturaleza y paisajes formados por pinares, llanuras, riberas de ríos y un mar de vides.

La gastronomía es otro de los puntos fuertes de la visita ya que cuenta con 6 bodegas que ofrecen degustación de una amplia variedad de caldos autóctonos y una cocina tradicional en la que el producto estrella es el champiñón. Villanueva de la Jara fue el primer lugar de la comarca donde se cultivó este hongo. La industria y las diferentes fases de producción son un reclamo turístico que les sube al tren del "fungiturismo español".

Situada en la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, la provincia de Cuenca cuenta con una extensión de 17.141 km2 y un total de 238 municipios. Un territorio que ofrece al visitante diferentes y hermosos paisajes.

Cuenca es el lugar ideal para disfrutar de la naturaleza en estado puro en todos y cada uno de sus rincones. En la provincia puedes descubrir parajes de extraordinaria belleza como el Parque Natural de la Serranía de Cuenca, conocer sus ríos, su fauna y flora. Pero Cuenca también es historia, patrimonio y gastronomía.

En Cuenca, por ejemplo, puedes aprender sobre los dinosaurios gracias a los descubrimientos que se han realizado en sus yacimientos paleontológicos o visitar sus yacimientos arqueológicos.

Su rica gastronomía es otro de los puntos fuertes de la provincia. Productos típicos, vinos o quesos que sorprenderán a cualquier visitante. A todo ello se suman sus celebraciones y tradiciones centenarias.

La Semana Santa de Cuenca está declarada de Interés Turístico Internacional y la capital es Patrimonio de la Humanidad.

Cuenca, un lugar inolvidable.