Los timadores no se apiadan de las monjas, las estafas llegan a los conventos: "Muy pendientes de ellas"

"No podemos dejarlas solas", la Iglesia católica debe de estar "muy pendiente" de las necesidades de las monjas tras casos como el de las clarisas de Belorado, es lo que ha afirmado el provicario general de la Diócesis de Toledo y vicario episcopal para la vida consagrada, Raúl Muelas.

La polémica desde hace unas semanas con las monjas Clarisas de Burgos, viene porque han decidido romper con la Iglesia Católica por problemas en la venta de un convento en Derio, Vizcaya. Las monjas planeaban vender este inmueble para financiar la compra del monasterio de Orduña, pero se encontraron con trabas desde la diócesis y el Vaticano, que bloquearon la operación y cuestionaron la identidad del comprador. En su comunicado, las religiosas acusaron a los papas posteriores a Pío XII de herejía y rechazaron las doctrinas del Concilio Vaticano II, optando por seguir a un obispo excomulgado, Pablo Rojas Sánchez-Franco, conocido por su oposición radical al Vaticano

El Arzobispado de Burgos y el Obispado de Vitoria han expresado su sorpresa y rechazo ante esta decisión, y han pedido a los fieles que no participen en actos litúrgicos organizados por las monjas de Belorado y Orduña, advirtiendo sobre posibles sanciones de excomunión por el delito de cisma. Es una situación complicada, por ello Raúl Muelas ha añadido "que casos como el de las clarisas de Belorado hacen pensar que desde la Iglesia católica hay que estar muy pendientes de las necesidades que puedan tener las monjas y no dejarlas solas".

Lejos de este contexto, en la convocatoria de la Asociación de Amigos de los Conventos de Toledo, Muelas ha asegurado que dentro de los conventos hay todavía "mucha ternura y mucha inocencia" a pesar a pesar de ser mujeres "con una inteligencia y con un arrojo muy grande".

Timos en conventos

El provicario general de la Diócesis de Toledo ha querido hacer público que casi todos los meses tiene que enviar "whatsapp a los conventos de la Diócesis toledana para advertirles de que tengan cuidado con los timadores porque reciben llamadas telefónicas de personas se hacen pasar por autoridades diocesanas pidiéndolas hacer transferencias de 500 euros".

También ha comentado el caso de gente que llama a monjas que hacen dulces y les dicen que están el hospital tras consumir dulces que compraron en el convento, y les amenazan con denunciarlas para luego decirles que se olvidan del asunto si les pagan 500 euros.