‘Hacer Novillos’: ¿De dónde proviene esta popular expresión?

Seguramente todos en alguna ocasión o tal vez más de una, ‘hemos hecho novillos’, reconozcámoslo, hemos faltado a clase, nos hemos saltado alguna hora, bien porque la asignatura nos resultaba tediosa o bien porque el profesor no era de nuestro agrado, en fin… mil excusas, que entonces nos servían de justificación para no asistir a esa clase o para atemperar la conciencia, en caso de remordimiento.

Pero, ¿Cuál es el origen de esta popular expresión? Según afirma Alberto Buitrago en su Diccionario de Frases Hechas, hace referencia a aquellos jóvenes estudiantes que querían ser toreros y se escapaban de la escuela para torear novillos en las dehesas. Como anécdota curiosa, el propio Rafael Alberti, poeta de la ‘Generación del 27’ reconocía haberse escapado del colegio en el que estudiaba para poder practicar el noble ‘arte de cúchares’, aunque su carrera como torero no fructificó, es más fue muy breve, tanto que sólo duró tres horas. En el año 1927 en la plaza de toros de Pontevedra, se vistió de luces y salió a hacer el paseíllo con la cuadrilla del célebre torero, escritor y amigo, Ignacio Sánchez Mejías.

De faltar a clase para ir a torear, ‘hacer novillos’ se convirtió en una expresión popular que significa ausentarse del colegio para ir de parranda o pasear por las calles. Antiguamente, en algunas zonas rurales, los niños que ya se consideraban mano de obra útil, tenían la obligación de ayudar en las faenas del campo, siempre era necesario echar una mano en casa con las innumerables tareas que marcaba aquella economía de subsistencia, por lo que faltaban a la escuela para atender al ganado.

Con el tiempo, se empezó a asociar esta frase con la costumbre de faltar a clase. En Cataluña se dice “hacer campana”, en Extremadura “hacer monta”, en Galicia “latar”, en Canarias “hacerse o pegarse la huyona”, en Murcia “fumarse la clase”, en Andalucía “hacerse una piarda”, en Madrid y centro de España “hacer pellas”.

En algunos países hispanoamericanos, también se conoce esta costumbre como “capar clase”, “fugarse”, “ratearse”, o “hacer la cimarra”. El caso es que tal abundancia de expresiones, indica que faltar a clase es una práctica social muy extendida y se considera además todo un arte.

Silvia Rodríguez, colaboradora de COPE Bierzo

Silvia Rodríguez es colaboradora de COPE Bierzo desde el 24 de junio de 2019. La podréis leer y escuchar los lunes en la sección de opinión bajo el título ‘Silvia en COPE Bierzo’ y los fines de semana ‘Con otra perspectiva’. Todo ello en Cope.es/Bierzo.

Es licenciada en Filología Inglesa por la Universidad de Salamanca, decidió estudiar esta carrera porque le apasiona la lengua y especialmente la literatura. Además, le encanta leer, escribir y escuchar buena música. Es feliz trabajando en equipo y entiende “que estamos aquí para ayudar y hacer felices a los demás”.

También es socia fundadora del Banco de Alimentos del Sil y colabora con esta ONG que realiza una gran labor en nuestra comarca. Enamorada de su profesión, la enseñanza. Es profesora de inglés, lengua y literatura en la Academia Corcal.

Se define como una persona vital, alegre, optimista y sobre todo con gran sentido del humor. Además, ha realizado el prólogo del libro ‘Chuma. El Valle del Silencio’ del andaluz Miguel Velasco Nevado.