El truco de la mochila: así lograron robar 600 euros en whisky sin que nadie se diera cuenta

Hay en este mundo personas especialistas en casi todo, incluso en sustraer licores de las grandes superficies, y para muestra el suceso ocurrido hace tan solo unos días en Palencia. 

Dos hombres, con cazadoras oscuras y movil en la oreja, entraron en un supermercado de la capital palentina con una mochila y un plan bien ensayado. Su objetivo: el pasillo de bodega y licores. Pero no cualquier licor, sino el más caro de todo el lineal.

Llegaron a Palencia con un propósito: el lineal de licores de un supermercado

La forma de hacerse con el botín estaba bien estudiada. Accedían ambos al interior de un supermercado portando un carro de compra con una mochila en su interior. Iban hablando por teléfono para disimular, y ataviados con ropa oscura.

La elección de la cadena de supermercados puede que no fuese casual, ya que parece que les ayudaba en sus fechorías que la superficie comercial fuese de una determinada franquicia, a tenor de sus acciones.

En el primer súper, mientras uno hacía de "vigía", el otro metió en el interior de la mochila hasta ocho botellas de whisky. 

Luego, el que vigilaba salió tranquilamente con la mercancía cargada sin pasar por caja. 

Pero no se quedaron ahí: aprovecharon su viaje a Palencia para repetir la misma jugada en otro supermercado de la misma cadena, llevándose en total otras 12 botellas del mismo licor.

En pocos minutos con este modus operandi consiguieron hacerse con un total de 20 botellas de whisky valoradas en cerca de 600 euros, una media de 30 euros por botella.

Ladrones expertos en el robo de licores

Según una nota remitida ayer a los medios de comunicación, La Policía Nacional ha identificado a ambos en el trascurso de una investigación. 

Al parecer no son nuevos en este tipo de delitos, ya que se trata de dos varones de nacionalidad extranjera y residentes en la Comunidad de Madrid, que cuentan con un amplio historial de detenciones por robos similares en otras provincias a Palencia.

El caso ya está en manos de la autoridad judicial.  Lo cierto es que esta vez, su “plan maestro” terminó con un final menos "embriagador" de lo que esperaban.