La academia de Gustavo, en Catarroja, a punto de reabrir gracias a la ayuda de los voluntarios
Gustavo Álvarez es un soriano afincado en Catarroja que vio devastado su negocio por la DANA y que ahora está a unas semanas de poder reabrir su academia de idiomas
Soria - Publicado el
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Gustavo Álvarez es un soriano afincado en Catarroja que vio como la academia de idiomas que regenta quedaba arrasada por el paso de la DANA. Más de dos meses después y con la ayuda de numerosos voluntarios, los trabajos de rehabilitación marchan a buen ritmo y es probable que pueda reabrir a principios de febrero.
Hoy ha pasado por los micrófonos de COPE Soria y ha explicado que la reapertura se ha retrasado alrededor de un mes pero la necesidad de subsanar los problemas de humedad han alargado un poco más de lo previsto los planes iniciales.
Gustavo nos ha contado que la academia de idiomas quedó totalmente devastada, el agua se llevó tabiques, persianas y ventanas y la humedad ha sido uno de los principales enemigos y el primero a atajar. De hecho todavía no se ha solucionado en multitud de garajes “que todavía acumulan agua y lodo y si no se hacen los tratamientos adecuados, la humedad vuelve a salir”.
Este autónomo soriano, que lleva más de quince años en Catarroja, explica que este fin de semana acabaron con el tratamiento para erradicar las humedades y ahora están centrados en los trabajos de carpintería.
Ahora y después de semanas de trabajo intenso, ya ven la luz al final del túnel. Este soriano, natural de Ágreda, no tiene palabras suficientes de agradecimiento para toda la gente que se ha volcado para que puedan retomar su negocio. “Si no hubiese sido gracias a toda esa ayuda tanto material como económica no hubiese sido posible llegar a la altura de la reconstrucción en la que estamos hoy”, señala emocionado Gustavo Álvarez que subraya “la fuerza” que les ha dado a toda la familia “sentirte arropado y que no te van a dejar caer”.
El apoyo y la ayuda que le han prestado desde la Casa de Soria en Valencia, de la que es socio fundador, ha sido fundamental en estas semanas. Reconoce que en los momentos iniciales “el golpe moral fue muy fuerte” pero la ayuda de tanta gente “nos ha dado realmente ganas de seguir”. Gustavo regenta la academia desde hace 13 años pero hace tan solo tres años que había estrenado las instalaciones que quedaron devastadas con la DANA.
A día de hoy todavía llegan con cuentagotas las ayudas de las administraciones, tanto de la Generalitat Valenciana como del Estado, pero no ha cesado ni un minuto y desde el principio la ayuda de personas a título individual.
La obra ya está muy avanzada, queda instalar el mobiliario y recabar algo de ayuda para completar las aulas pero con la vista puesta en abrir en unas tres o cuatro semanas.