El Gobierno mantiene la previsión de final de año para la apertura de la cárcel de Soria con 200 funcionarios
El secretario general de Instituciones Penitenciarias, Angel Luis Ortiz, ha explicado que la apertura total dependerá de las necesidades
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
El Gobierno mantiene la previsión de apertura de la nueva cárcel para finales de este año o comienzos de 2020 con cuatro módulos y 200 funcionarios que podrán irse ampliando en función de la población penitenciaria en España y del proceso de reposición de los empleados públicos. Lo ha destacado hoy en su visita a la nueva prisión el secretario general de Instituciones Penitenciarias, Angel Luis Ortiz, quien ha señalado que una parte de los 956 nuevos puestos de la oferta de empleo público se destinarán a la cárcel de Soria.
Instituciones penitenciarias no descarta acelerar la apertura de más módulos si se dan las expectativas de generar trabajo productivo dentro de la prisión. Angel Luis Ortiz ha destacado en este sentido el alto grado de ocupación en talleres laborales de la actual prisión, un reto que se quiere mantener con la apertura del nuevo centro. "Si algo tuviéramos que definir de la actual cárcel es la capacidad que tiene de generar trabajo y el reto será ahora mantenerlo cuando se abra el futuro centro penitenciario", ha añadido el responsable de Instituciones Penitenciarias que ha felicitado por esta labor al director de la prisión, Segundo Pascual. Los trámites para la apertura del nuevo centro penitenciario avanzan al ritmo previsto. Se espera poder adjudicar en abril la obra del colector que tiene un periodo máximo de ejecución de nueve meses y la previsión es que dos meses antes de la apertura se produzca la orden de la RPT de la nueva prisión que por otro lado está ya diseñada y prevé que cuente con un total de 419 funcionarios y 32 de personal laboral cuando esté a pleno rendimiento.
Por su parte la delegada del gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, se ha felicitado de los pasos dados por el gobierno socialista para una obra acabada en 2014, que ha supuesto una inversión de 134 millones de euros y que estaba costando un millón de euros anuales para su mantenimiento y conservación.