MIGRANTES
La historia de un joven marroquí asentado en Valladolid que llegó con 13 años: “Puedes caer”
Oussama Souhkhane nos ha contado en Herrera en COPE que decidió salir de su país hace siete años en busca de nuevas oportunidades

Oussama Souhkhane nos ha contado en Herrera en COPE que decidió salir de su país hace siete años en busca de nuevas oportunidades
Valladolid - Publicado el - Actualizado
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Oussama Souhkhane, es un joven marroquí que cuando tenía 13 años salió de su ciudad, cercana a Marrakech, en busca de nuevas oportunidades. Afincando en Valladolid, ha pasado por un centro de menores en Andalucía y luego desembarcó en Valladolid en el centro José Montero de la Junta de Castilla y León y por La Merced Migraciones donde obtuvo el arraigo social.
Se marchó de su país hace 7 años. “Cada uno sale por un sentido. Yo salí para cambiar la vida, por el trabajo, no hay tanto y sueldo bajo”, nos contaba en COPE.
Llegó en patera a Cádiz, después de un viaje de más cuatro días que nunca olvidará porque “no venir en un avión normal”. “Hay muchos riesgos, puedes llegar, puedes caer, volcarte en el medio. Hay muchos problemas pero gracias a Dios que he llegado bien”, nos relataba en Herrera en COPE.
Ahora trabaja en la hostelería en un bar de Valladolid, pero antes estuvo en el campo y en la construcción. La adaptación no fue fácil. “Primero el idioma, tienes que aprenderlo, encontrar los papeles, arreglar tus cosas... buscar el trabajo, eso viene después de muchas cosas. Buscaba muchos trabajos y ninguno me daba trabajo hasta que encontré”, explica.
El empeño de Oussama no decaía en buscar empleo y formarse. “Fui al cole, a los centros que dan clase de español, cursos. Coger el idioma, estudiar hacer algo que te ayuda luego. Hacer cosas que mañana lo vas a necesitar y te van a ayudar. Mientras te dan la oportunidad de estudiar, pues estudio, si te dan la oportunidad de trabajar pues a trabajar”.
Migrantes en Castilla y León
Castilla y León recibirá 309 menos migrantes tras el cuestionable reparto que el gobierno ha hecho de los 4.400 menores no acompañados que han llegado a las costas españolas. A esta comunidad llegará el siete por ciento frente al 0,5% que irá a Cataluña. La llegada debe hacerse con la mayor de las garantías y dimensionando los servicios de que dispone la comunidad, ahora están sobrepasados un 38%. La llegada es masiva y el reparto desequilibrado, pero mientras se regula la llegada, la atención hay que prestarla.