El Consejo Municipal de Inmigración de Barcelona denuncia el retraso y acumulación de expedientes.

El CMIB ha presentado, este miércoles, una declaración a la subdelegación del gobierno en Barcelona donde denuncia la situación que se vive en la Oficina de Extranjería de Barcelona.

"Hay un retraso de más de 22.000 expedientes que afectan a más de 60.000 personas y esta irregularidad genera muchas dicifultades para las personas extranjeras. Se quedan al margen de la sociedad, excluyen a los niños de la escuela y a los padres de poder trabajar", confirma Javier Bonomi, de la Federación de Entidades Latinoamericanas.

La normativa marca que el plazo para resolver dichos expedientes es de tres meses y actualmente van por ocho. Solo la admisión lleva un retraso de 3 a 5 meses y la resolución final un año.

El sindicato asegura que el problema reside principalmente en la subdelegación de Barcelona por la escasez de funcionarios, que es muy baja en proporción a la cantidad de inmigrantes residentes.

En cuanto a la llegada de refugiados ucranios, consideran que habrá mucha más peticiones de asilo y ven "impensable" que esta misma administración los pueda resolver.