Guerra a las toallitas en el WC. El canal de Isabel II retira cada año 30.000 toneladas de residuos que nunca tendrían que haber llegado allí

Es una costumbre que hemos adquirido desde hace ya algunos años. Hemos sustituido el papel higiénico por toallitas, pero a pesar de que en los envases indica que son adecuadas para WC, esto en la práctica no es así.  30 MIL toneladas de residuos sólidos indeseados llegan cada año a las estaciones de depuración del Canal de Isabel II. Esos residuos son toallitas pero también discos desmaquillantes, algodones, bastoncillos de los que usamos para limpiarnos los oídos....Materiales que NUNCA deberíamos tirar por el retrete, pero que acaban en la red de saneamiento formando auténticos tapones y atascos en las tuberías.

Pero esos residuos no solo llegan a las depuradoras del Canal, sino también a los más de 300 aliviaderos que tiene el río Manzanares. Aquí llega el agua que desborda, que no pueden tragar los colectores cuando hay una tormenta. Hay una rejilla que retiene todos los materiales inorgánicos que no se han descompuesto. Las aguas residuales de las casas van a las alcantarillas por unas tuberías muy grandes y de allí a las depuradoras donde hay filtros que atrapan esos residuos. Pero cuando llueve mucho, la tubería no traga lo suficiente y ese agua se arroja al Manzanares. En esos aliviaderos hay unas redes que este año han recogido 1.500 toneladas de desechos. ¿Y cuáles son esos desechos?  Belén Benito, directora de operaciones del Canal de Isabel II explica que "no solo son los residuos que hemos tirado indebidamente al retrete, sino todo lo que hay en la calle que no se ha recogido, como latas, trapos, cristales....etc"

TOALLITAS BIODEGRADABLES QUE NO LO SON

Es habitual que veamos en los envases de las toallitas húmedas que son biodegradables, pero este concepto está condicionado por el tiempo que tarde en deshacerse. "si una cosa es biodegradable en 50 años no es biodegradable".- explica Bento. "Por biodegradable nosotros entendemos que es algo que se deshace en horas o en pocos días y unas toallitas nunca deberían arrojarse al inodoro sino a una papelera que luego depositaremos en el contenedor gris de restos..."

Se trata de un pequeño gesto que a la larga es muy importante. Además hay que tener en cuenta que las toallitas también pueden atascar nuestras tuberías de casa, una avería que puede resultar cara.