¿Qué personas sucumben más a las estafas del amor?
Tener carencias afectivas y verlas, por fin, cubiertas a través de estas estafas hace que las víctimas se cieguen tanto que no quieran ver la realidad
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Nadie está a salvo de caer en las redes de estos estafadores. Si es verdad que los menores de 50 años conocen más los riesgos de las redes, pero la necesidad de cariño y de no sentirse solo, suele ser más poderosa que el sentido común y eso es lo que hace que se termine cayendo en este tipo de timos.
Elena Daprás es psicóloga y nos ha explicado a Cope que “normalmente las personas que caen en este tipo de estafas son personas que tienen necesidades emocionales, es decir, somos un quesito gruyer para este tipo de estafas y estafadores, en las que detectan nuestra necesidad emocional y ahí van a rellenar esas necesidad a través de la confianza”.
El hecho de sentir, por fin, esa necesidad cubierta hace que estas personas no desarrollen un sentimiento de culpa por sucumbir a lo que se les pide, a pesar de que la gente les avise de ello. “Uno no es consciente de que está siendo estafado porque entran a través de la confianza”, nos detalla esta experta. “Entonces tú les otorgas tu confianza, crees en ellos, crees en lo que están haciendo y lo que te están diciendo porque están cubriendo tu necesidad”, concluye.
Desde diciembre, la Policía Nacional ha registrado 80 víctimas de estafas del amor.