GALAPAGAR
Iglesias estrena garita de la Guardia Civil en su chalé y los vecinos critican el ruido del generador
No lleva ni 24 horas y ya ha suscitado las quejas de la vecindad. La Guardia Civil ha ordenado que se apague: los agentes se quedan sin luz ni calefacción

Caseta de la Guardia Civil en el chalé de Iglesias y Montero
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Los líderes de Podemos, Pablo Iglesias e Irene Montero, han estrenado una instalación de la Guardia Civil en la puerta de su casa, más habitualmente conocida como garita de vigilancia. Los agentes que vigilan la casa de Galapagar han mostrado, en varias ocasiones, su malestar ante la falta de recursos para realizar este servicio, destacando la ausencia de un baño donde poder hacer sus necesidades. De hecho, la Unión de Guardias Civiles instaló un urinario portátil.
En la tarde de este martes se ha colocado esta garita, acompañada de un carro con un generador eléctrico, donde los agentes de seguridad pasarán las horas vigilando para que no haya ningún tipo de altercado en la casa de los líderes de la formación morada. La Unión de Guardias Civiles de Madrid ha denunciado en un tuit las malas condiciones en las que los agentes de seguridad siguen realizando esta tarea.
El principal problema se encuentra en el generador situado al lado de la garita, ya que muchos vecinos han mostrado su descontento por el ruido que hace.
Ante las numerosas reclamaciones, la Guardia Civil ha dado orden interna de proceder a su apagado, por lo que los agentes que custodian las 24 horas el chalé no tendrán ni luz ni calefacción. "Tendrán que prestar el servicio en el coche, no les queda otra porque la garita no sirve para nada. Tampoco tiene baño", apunta Guillermo Freire, portavoz de la Unión de Guardias Civiles de Madrid.
Los residentes han trasladado sendas quejas sobre el ruido del generador ante el Ayuntamiento y la Guardia Civil. La Benemérita instaló allí una garita hace unas semanas, tras solicitar una autorización al Ayuntamiento el pasado 28 de diciembre.
Hasta entonces, los agentes destinados por el Gobierno a vigilar la casa de los diputados nacionales se quejaban de que no tenían un espacio donde resguardarse y asearse. La caseta necesita un grupo electrógeno que funciona con gasolina para dotar de electricidad a este pequeño espacio.
Normalemnete este tipo de instalaciones para la vigilancia se colocan dentro de la finca de los protegidos, pero la pareja se ha negado. Y cuando se instala fuera, se hace en condiciones adecuadas. "La garita está en medio de la vía pública con cuatro conos. No lo vemos ni lógico porque atenta contra la seguridad vial", añade Freire.