El vino valenciano ecológico a la conquista de Europa

923 metros es la altura que está situada la bodega Baldovar 923, en Alpuente, en lo que un día fueron las instalaciones de la cooperativa San Roque. Un lugar especial para hacer un buen vino con tratamiento bajo el concepto de respeto a la biodiversidad del suelo.

Estos vinos valencianos ya han sido objeto de deseo de muchos amantes de los buenos caldos e incluso la revista Decanter calificó con 94 puntos, su vino Rascaña Orange Wine 2018; un vino muy singular con apenas filtración y con un color ambarino.

Nito Alegre uno de los artífices de estos vinos visita el programa GastroCOPE para descubrir que todo este proyecto comenzó, casualmente, en una reunión de padres del colegio de sus hijos. "Empezamos a visitar la zona y sus viñedos y nos encontramos rehabilitando la antigua cooperativa e iniciando el proyecto".

"El mundo del vino es un mundo de pasión de emociones y nuestra iniciativa tuvo muy buena acogida porque además este proyecto tiene un componente de rehabilitación de la zona y eso ilusiona mucho", reconoce Alegre.

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VITICULTURA ECOLÓGICA

Baldovar 923 convierte sus viñedos de viñas viejas a viticultura ecológica. Entienden que deben aportar a la tierra y a las plantas la vida que la agricultura convencional le había quitado, por ello cultivansin usar pesticidas ni abonos de síntesis química, solamente tratan las cepas con azufre en polvo y con un preparado ecológico de cola de caballo, en ambos casos aplicados a mano. Además no utilizan tractor en los tratamientos para minimizar la compactación del suelo.

Se labra lo menos posible para mantener la cubierta vegetal espontánea que nos da equilibrio en la diversidad de microorganismos e insectos en el viñedo, además de ayudarnos a controlar el vigor. Todos los campos se trabajan siguiendo el calendario lunar para las diferentes tareas a realizar.