La realidad de los colegios en las zonas rurales despobladas: "Más profesores que niños"

Las zonas despobladas viven un nuevo arranque de curso con la mirada puesta en sus alumnos y en las ratios. Sobre todo después de que Educación se viera obligada a bajar la ratio a menos de 25 estudiantes por clase en 39 municipios de Valencia, debido, precisamente, a la despoblación.

Es el caso, por ejemplo, de la zona de Rincón de Ademuz. En los últimos siete años, el Rincón de Ademuz ha perdido el 9,4% de su población y, sumando el conjunto de los siete municipios que lo conforman -Castielfabib, Ademuz, Vallanca, Puebla de San Miguel, Casas Bajas, Casas Altas y Torrebaja-, tan solo alcanza un total de 2.189 habitantes. Les cuesta mantener la ratio que les permita que la escuela siga en marcha.

En el centro escolar “Colegio Rural Agrupado Rincón de Ademuz” llegan a compartir clase niños de diferentes cursos. En una hay, por ejemplo, hay 8 niños de los cursos 1º,2º y 3º, y en otra hay otros 8 niños, de 4º,5º y 6º. El total de estas dos aulas suman 16 niños, a los que hay que añadir 2 más que hay en infantil. "En total este año tenemos 18 niños", como explica su directora, María Ángeles García.

Esto tiene una parte positiva, como reconoce María Ángeles, y es "la atención individualiza y personal que se le puede dar a cada uno de los niños". Porque, añade, "tenemos 30 profesores y dos educadoras, lo que nos permite dedicar más atención a los pequeños".

"Lo que no queremos es que nos quiten personal, porque no nos dejaría dar este tipo de atención", resalta la directora.

Con todo, la Comunitat Valenciana ha recuperado dos escuelas rurales y ha habilitado seis unidades de 0-3 años en zonas despobladas. Se trata del aulario de Teresa del CRA Peña Escabia y el CEIP El Puig, de la Vall d’Ebo, que estaban en situación de “no funcionamiento” por falta de alumnado. Reabren sus puertas este curso con cinco y ocho alumnos respectivamente.