Una finca municipal en el cerro Arropez, cerca del CEFOT, albergará el centro budista

La finca municipal situada en el cerro Arropez, a medio camino entre Cáceres y Valdesalor, muy cerca del CEFOT, será la ubicación del centro budista impulsado por la Fundación Lumbini Garden en la capital cacereña, según ha desvelado este domingo el Ayuntamiento de Cáceres

Son 101 hectáreas de terreno que contarán con una gran estatua de Buda de unos 60 metros de altura, embajadas de las principales ciudades budistas orientales, una estupa de paz para la meditación, un monasterio para veinte monjes, jardines y un centro universitario asociado al país birmano para el contacto entre estudiantes de Asia y Occidente.

El concejal de Urbanismo, José Ramón Bello, ha informado de que algunas de las características que ha hecho que el ayuntamiento apueste por esta propiedad municipal son “las buenas comunicaciones, un entorno medioambiental degradado pero susceptible de ser mejorado con esta propuesta de centro budista y una localización sin un impacto visual en la ciudad”.

De esta forma se continúa trabajando para que la amistad iniciada entre las ciudades de Cáceres y Lumbini se siga fortaleciendo, según ha apuntado el Ayuntamiento, con la construcción futura en su término municipal del centro budista, con una inversión de 25 millones de euros de capital privado.

Un lugar, que según ha recordado Bello, “va a ser el punto de unión y reunión de todos los budistas de Europa, y que en este momento está siendo diseñado por un equipo multidisciplinar de técnicos tanto nepalíes como españoles”.

Cabe recordar que ya está de camino a España una réplica de menor tamaño, en concretro de dos metros, de la gran estatua de Buda prevista para este complejo.

Se espera que llegue a Cáceres a principios de septiembre, tras recorrer más de 9.000 kilómetros, como “símbolo” del hermanamiento entre la ciudad y Lumbini.

Este Buda Mahar Karuna, esculpido en jade blanco birmano y valorado en casi medio millón de euros, pesa casi dos toneladas, y el Ayuntamiento tiene que decidir aún su ubicación, aunque el alcalde Luis Salaya ya apuntó que si los informes técnicos lo permiten, el Palacio de la Isla podría ser su destino.