Percebes de 220 euros y centollas “espectaculares”: el ambiente navideño en un mercado de A Coruña

Cigalas saltando entre percebes, placeras con gorros de Navidad y billetes verdes y amarillos: los de 100 y 200 euros. Este era parte del puro ambiente prenavideño esta mañana en la plaza de Lugo de A Coruña. Hoy,  llena de gente, comprando y mirando el producto para llevar a la mesa en Nochebuena y Navidad

La estrella, como siempre: el marisco. Muy codiciado, porque hasta el domingo la costa gallega encadenó temporales. Como siempre, está todo más caro de lo habitual. Desde noviembre ha ido subiendo el precio del producto, debido a las malas condiciones meteorológicas, y no ha habido la alternativa de congelar parte del producto. El producto, además, llegó hasta última hora. A las diez de la mañana todavía estaban llegando camiones del puerto con mercancía para vender.

LOS PRECIOS, MÁS CAROS DE LO HABITUAL

Las cigalas, fresquísimas, costaban entre 60 y 120 euros según tamaño. Los camarones, entre 80 y 180. Hemos visto santiaguiños a 160 y nécoras a 45, pero el rey esta Nochebuena es, cómo no, el percebe. Estos días se vendió alguno a 300 euros el kilo. Hoy había poco, y no precisamente barato De 90, 120, 150... o 220 euros, según el puesto. “No es el tamaño que suele haber cuando hay buena marea”, reconocía una placera.

Aunque para espectaculares, las centollas: grandes y “cargaditas”, dicen los vendedores. Con precios entre 45 y 55 euros el kilo, con pinzas amenazadoras y buenos tamaños. “La centolla está a 55, la de Mugardos, pero es un espectáculo”, decía una de las vendedoras.

En pescado, hay menos variedad que otros años. Con precios que parten la meiga de 12, la lubina de 18 o la merluza del pincho a 15. Entre lo más caro, el besugo, a 60 euros. Rodaballo o pargo son algunas de las especies que estaban hoy a la venta.

CARNE PREPARADA... Y HASTA JABALÍ 

Pero la comida familiar quedaría coja si solo hubiese marisco. El cordero está entre lo más demandado de las carnes. Cada vez se estila más pedirlo asado, igual que los rollos de ternera o las piernas de cerdo, con decenas de encargos ya reservados en las estanterías del primer piso.

Y, si tenemos ganas de algo original, podemos llevar jabalí. “Se vende bien en esta época”, decían en uno de los puestos. “Lo ponemos preparadito y macerado para que la gente pueda llegar a casa y prepararlo”, comentaban.