Un militar de La Coruña comienza el Camino de Santiago y sus compañeros no pueden creer cómo termina

Son muchos los que escogen el Camino Inglés para peregrinar hacia Santiago de Compostela desde Ferrol, pero pocos los que consiguen recorrer los 112 kilómetros que separan ambas ciudades corriendo y en once horas. Normalmente, la ruta lleva cinco días para el resto de los mortales.

Así lo ha hecho el cabo primero de la Unidad de Buceo de la Armada en Ferrol, el naronés Roberto González Cinza, corredor aficionado que asegura que lo mejor de todo fue la sensación de llegar el cuarto día a la Plaza del Obradoiro: "Como cuando corrí mi primera maratón, la sensación es increíble".

Lo más duro, curiosamente la etapa más corta de esta ruta, la que va desde Pontedeume hasta Betanzos, por los desniveles; a pesar de todo le llevó poco menos de dos horas recorrer veinte kilómetros. También la mochila o el horario tardío de apertura de los albergues municipales, condicionaron su experiencia que los peregrinos que se iba encontrando por el camino y sus propios compañeros, han descrito como una auténtica hazaña.

Ahora le están proponiendo otro reto, que Roberto todavía se está pensando, realizar el Camino Inglés corriendo en un sólo día. Difícil pero no imposible para este militar imparable.

INTEGRANTE DE UN CUERPO DE ÉLITE: LA UNIDAD DE BUCEO DE FERROL

El espíritu militar, la perseverancia, constancia y pasión por el deporte han hecho que Roberto con treinta años de carrera en la Armada, decidiese incorporarse hace cinco años y tras dos meses de dura formación, a uno de los cuerpos más especiales, la Unidad de Buceo.

Son una sección compuesta por menos de cien personas en toda España, que tienen delegaciones en Cádiz, Cartagena y las Islas Canarias. Aquí en Ferrol, no llegan a veinte, y se dedican a varias misiones en toda la franja cantábrica, desde mantener a flote los buques de la Armada, a desactivar explosivos sumergidos, colaborar en dispositivos de búsqueda y rescate o conservar el Patrimonio Arqueológico Subacuático. Un grupo de élite que entrena todos los días, como poco una hora para conseguir estar en forma y enfrentar los duros retos de su oficio.

Para Roberto González lo más duro de su carrera como buzo fue estar casi dos meses recuperando pontones en Castro Urdiales después de que en el año 2021 la adversa climatología desarmase el puente flotante que habían construido para probar su efectividad en mar abierta. También se quedó bastante "tocado" tras la intervención de la unidad en el río Miño en el año 2022 cuando un niño de diez años y su padre fallecieron arrastrados por la corriente.

ACERCA DE LA UNIDAD DE BUCEO DE FERROL

Perteneciente al Mando de las unidades de la Fuerza de Acción Marítima en Ferrol a través del cual está integrada en la Fuerza de Acción Marítima cuyo cometido principal es prepararse para proteger los intereses marítimos nacionales y el control de los espacios marítimos de soberanía e interés nacional, encargándose en forma integral, de asegurar la cooperación permanente con los organismos de la Administración con competencias en el ámbito marítimo, lo cual constituye la contribución de la Armada a la Acción del Estado en la Mar.

Cuenta con personal especializado en buceo y está capacitada para llevar a cabo diversidad de misiones, desde el mantenimiento a flote de los buques de la Armada, la protección del Patrimonio Arqueológico Subacuático, la desactivación submarina de explosivos (competencia exclusiva de la Armada), y aquellas tareas de búsqueda en dispositivos de salvamento y rescate.