Dispositivo especial de tráfico con motivo de la etapa de La Vuelta entre Muros y el mirador de Ézaro

La Vuelta llega a Galicia. Y lo hace con la que, sin duda, es una de las etapas que más expectativas ha generado desde que se presentara el trazado definitivo. La 13ª etapa, entre la localidad coruñesa de Muros y el mirador de Ézaro, en Dumbría, cronometrada individual de poco menos de 34 km y en la que muchos anticipan ya un duelo deportivo entre los dos máximos aspirantes a llevarse esta Vuelta, Primoz Rogliz y Richard Carapaz.

Pero para que se produzca ese espectáculo deportivo, son centenares las personas que llevan trabajando meses en garantizar la seguridad tanto en la salida de Muros y en la llegada a la altura de la espectacular cascada de Ézaro, como a lo largo de todo el trazado que discurrirá, básicamente, por la carretera AC-550, cruzando el ayuntamiento de Carnota, hasta el desvío, ya a los pies del macizo del Monte Pindo, hacia el mirador de Ézaro.

Y para ello, la Guardia Civil va a movilizar a cerca de 200 agentes que se desplegarán a lo largo de todo el trazado, acompañando también a cada uno de los corredores que disputarán la etapa. Operativo que estará compuesto por vehículos y efectivos del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de A Coruña, de las Unidades de seguridad ciudadana de la zona y de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECIC) de la Comandancia de A Coruña y que tiene como misión garantizar el normal desarrollo de la prueba, colaborando con la Unidad de Movilidad y Seguridad Vial de la Guardia Civil que acompaña y da protección a los integrantes de la Vuelta y con las Policías Locales de los Concellos por los que discurrirá la etapa

190 EFECTIVOS, CASI 100 MOTOCICLETAS Y 1 HELICOPTERO

Un vasto operativo que, en lo que respecta a la Unidad de Movilidad y Seguridad Vial de la Vuelta, está compuesto por 130 efectivos, 1 helicóptero, 60 motocicletas, 13 vehículos todo Terreno, 4 monovolumen, 1 furgón taller, 4 furgones, 2 autobuses, 1 camión cisterna y 1 turismo. A este operativo, habitual en cada una de las etapas de La Vuelta, se le sumarán 59 efectivos, 34 motocicletas y 12 vehículos todoterreno de las unidades de Guardia Civil y Seguridad Ciudadana de la zona.

El cometido fundamental de este dispositivo, según informan desde el Instituto Armado, es proporcionar seguridad y movilidad a los corredores de la Vuelta, vehículos de organización, apoyo y caravana publicitaria, así como garantizar la seguridad vial al resto de usuarios afectados por el desarrollo del evento.

La organización prevé que el primero de los corredores en tomar la salida, y último de la clasificación general, salga de Muros a las 13.33 h, mientras que la llegada a Ézaro del último corredor se podrían producir en torno a las 17.20 h.

Eso significa que todo el trazado estará cortado al tráfico durante al menos 4 horas, aunque tanto antes del inicio de la prueba, como tras su fialización, la circulación a lo largo de todo el trazado se verá condicionada.