Salud, trabajo, estar en forma o dinero para todo, son las principales pretensiones de los vecinos de La Mariña de Lugo en 2025

Es habitual para la mente y el corazón humanos hacer proyectos, tener sueños, sobre todo cuando se tiene la oportunidad de empezar de nuevo, de arrancar una etapa diferente. La llegada de un nuevo año es un momento idóneo, por tanto, para hacer cábalas. 

Las habituales, con las que siempre bromeamos, ya sabemos todos cuáles son: aprender inglés, ir al gimnasio y dejar de fumar. Pero los gimnasios atesoran largas listas de socios que apenas aparecen por sus instalaciones los primeros días de un mes de enero, o de septiembre -para bajar las cañas y tapas de las vacaciones. Porque mantenerse fuerte y fichar con regularidad durante todo un año -con las prisas, el trabajo, la familia, los estudios y perezas varias- se antoja bastante complicado. 

Más de lo mismo con el tema "aprender inglés", al menos en una generación veterana ya a día de hoy. Una franja de población que nunca consiguió hablar con fluidez el idioma universal y sigue teniendo la espinita clavada en el corazón. Reconozcámoslo, a determinadas edades cuesta un poco ponerse a estudiar... 

Otro de los retos difíciles, y habituales, es dejar de fumar. Así que el mismo 1 de enero, después de atracones varios y con el estómago más amplio de la cuenta, aparcan el pitillo e incluso tiran el resto del paquete. Pero, en seguida, van notando los efectos de la ansiedad, ya sea mental o física, por hambre voraz o ganas de ahumar el ambiente. Se acaba cayendo de nuevo en el hábito. Y eso que uno se plantea el reto con razones de peso, cuidar la salud y evitar enfermedades futuras o mejorar la economía, porque eliminar el coste del tabaco supone ahorrar un pico. 

virgencita, virgencita...

Esos son los clásicos, luego hay quien pretende cambiar de trabajo, un ascenso o pedir un aumento al jefe. Pero con la que está cayendo, social y económicamente, muchos ya se conforman con aquello de "Virgencita, Virgencita..." 

Tener salud y trabajo, o poder pagar todo lo que nos viene son las pretensiones generalizadas entre las personas a las que hemos preguntado en la Mariña de Lugo. Teniendo en cuenta las subidas de precios que llegan, el coste de las energías, las facturas que no cesan y los gastos sorpresa que, inevitablemente, caen en cada hogar, apenas se pide que el 2025 no venga atravesado y lo digiramos bien. 

A continuación detallamos alguno de los propósitos, más o menos optimistas, que hemos recogido: una señora nos dice "que sea un poquito mejor que éste, no nos vamos a quejar",  un señor con cierta ironía sólo pide "seguir igual, más a menos como estamos hasta ahora, que aguantemos un poco". Encontramos una joven con ilusión que se propone "dejar de fumar, hay que ponerse y aprobar las oposiciones" y una madre que desea "criar este pequeño con salud, seguir trabajando y que haya dinero para todos". A un señor un poco desencantado le vale con "seguir trabajando y a ver si se da esto mejor que este año, sólo algo, porque esto cada vez está peor", y dos jóvenes con algo de esperanza apuntan a "correr cinco kilómetros" y "que haya salud e intentar mantenerse en forma".

Así que en general mantenemos amarrados los sueños más profundos y esperamos poder reír mucho y ser felices. Por lo demás "...que me quede como estoy".