La flota, inquieta por la Ley de Restauración de la Naturaleza aprobada en Europa

La inquietud y la incertidumbre por el futuro de la pesca en Galicia acaba de escalar un peldaño más con el visto bueno por parte de la UE de la conocida como Ley de Restauración de la Naturaleza. "Creo que han puesto un clavo más en la caja de madera, creo que cada vez estamos más acorralados, más presionados en el sector pesquero". ha dicho en COPE el presidente de las Asociación de Armadores del Puerto de Vigo, Javier Touza.

¿En qué consiste y qué pretende esta ley? Básicamente, se trata de una normativa que aspira a dar el paso de la protección a la recuperación, actuando sobre las áreas que los Estados miembros identificadas como “degradadas”, tanto en la tierra como en el mar. Una tramitación que podría traer más problemas para los pesqueros, con nuevas vedas, ya que hay zonas consideradas degradaras que estarán protegidas en hasta un 20 por ciento de su superficie. Y las consecuencias ya las intuyen sin ningún género de dudas los armadores.

Cierre progresivo

"Creemos que esto va a conllevar el cierre progresivo de áreas para pescar y esto es lo que más nos puede preocupar", asegura Touza.

"Asusta un poco, me recuera un poco a los planes quinquenales de la URRS, es un exceso de planificación que seguro, seguro, va a conllevar un aumento de los costos de producción", ha dicho por su parte Enrique López Veiga, que fue miembro de la Comisión Europea, Conselleiro de Pesca o presidente del Puerto de Vigo entre otras muchas funciones relacionadas con la pesca a lo largo de su vida profesional.

López Veiga, además, cree que la UE se está pegando un tiro en el pie, porque está restando competitividad a su flota, en la que se incluyen los barcos gallegos: "Si la UE impone estas condiciones no puede dejar entrar libremento productos que tienen una legislación menos permisiva, es una cuestion de una competencia leal, que es lo primero que hay que hacer", opina.

Demasiada legislación

A López Veiga le preocupa la capacidad de la Comisión Europea para evaluar el cumplimiento por parte de los países miembros de la normativa, y añade que le preocupa también ese exceso de legislación. "Summum ius summa iniuria", señala citando el aforismo latino según el cual un exceso de legislación es la peor de las injusticias, y cree que eso es lo que está pasando.

Molesta, además, el modo en que se ha aprobado la norma, después de un cambio de postura de última hora por parte de Austria que desequilibró la balanza pero que no es fruto, creen las fuentes consultadas, de un debate sereno.

"Creo demasiado precipitada esta adopción, in extremis, pegada al palo, en el minuto 93, y que realmente nos genera muchísima incertidumbre", dice Touza.

Este paso adelante de la UE se suma al cierre de 87 áreas a la pesca de arrastre y al palangre de fondo para la protección de los ecosistemas marinos vulnerables que entró en vigo en 2022, todo lo cual está complicando la existencia a la flota. Desde el sector pronostican más cierres, más barcos a la venta, menos empleo, menor autonomía alimentaria en la Unión Europea como consecuencia de esta normativa. Todo por una sostenibilidad ambiental que el propio sector, como recuerda siemrpe, es el principal interesado en mantener.