Cientos de coches recorren Palma exigiendo parar la Ley Celaá

A pesar del mal tiempo, el frío y la lluvia la comunidad educativa de la concertada y entidades que atienden a personas con discapacidad han salido a la calle en Palma en contra de la 'Ley Celaá' y para reivindicar los derechos de los padres a elegir en libertad la educación de sus hijos, en defensa de la educación especial, de la concertada y del castellano como lengua vehicular.

1.000 vehículos según la organización y 350 para la Policía

Unos 350 vehículos, según las primeras estimaciones de la Policía, facilitadas a través de Delegación del Gobierno en Baleares, y más de 1.000 coches según la organización han participado en esta sonora protesta por las calles de Palma que ha provocado retenciones y colapso en algunas de las vías del centro de Palma.

Según Schola Libera "ha sido todo un éxito" y es que afirman que cuando los primeros coches circulaban por el Born había vehículos que no habían empezado a circular desde el punto de partida.

Para el secretario general de Federación Enseñanza USO Baleares, Ismael Serrano, la manifestación de este sábado está justificada porque "la nueva Ley Celaá afecta a 4.000 puestos de trabajo de la escuela concertada ordinaria, a alrededor de 1.000 en educación especial y a unos 200 profesores de religión en la escuela pública".

"Si no hay demanda por parte de los padres que llevan sus hijos a centros educativos concertados y especiales, no habrá oferta de trabajo, produciéndose un trasvase hacia la pública. Si bien no es una lucha entre una modalidad u otra de enseñanza sino un tema de libertad, que cada uno pueda elegir", ha destacado.

Por su parte, la secretaria general de Escuela Católica, Llucia Salleras, ha advertido que la Ley Celaá "pone en peligro la escuela concertada y la especial".

"Queremos volver a la senda del diálogo y el consenso porque puede haber una convivencia pacífica entre los dos modelos de enseñanza en Baleares actualmente pero queremos que esto siga siendo así hoy y siempre, con independencia de quien gobierne", ha hecho hincapié.

Finalmente, el presidente de CECE-IB, Ventura Blanch, ha puesto en valor que la educación especial es "muy importante" en esta comunidad autónoma, señalando que "aunque hay niños que se pueden incorporar a la ordinaria, otros no".

Por ello, ha concluido "este sábado se ha salido a la calle a pedir una ley que perdure en el tiempo porque el futuro del país depende de la educación".

¡Paremos la Ley Celaá! ese es el objetivo de los cientos de familias, centros educativos , profesores y entidades que hoy han participado en la manifestación convocada por Schola Libera, la plataforma que representa a la comunidad educativa de la enseñanza concertada.

La protesta ha partido a las 10,30 horas desde la Calle del Callao de Palma y han recorrido las Avenidas, Paseo Mallorca, Jaime III, el Borne, Paseo Marítimo hasta acabar de nuevo en Avenidas y ha provocado retenciones en el centro de la ciudad.

Reivindicaciones

Para Schola Libera la nueva normativa educativa "reduce significativamente la elección educativa de los padres; se inventa un derecho en la educación pública y lo enfrenta al modelo de educación concertada; devalúa la enseñanza de la asignatura de Religión en la escuela y pone en entredicho la supervivencia de centros de educación especial", entre otros aspectos.

Los convocantes han pedido este sábado la protección y la continuidad de la "pluralidad" del sistema educativo actual, puesto que "la sociedad española es diversa y democrática y la enseñanza concertada posibilita un modelo plural".

Con todo, ha explicado Schola Libera, el fin de la manifestación es la "defensa de la convivencia de las escuelas públicas, privadas concertadas y privadas; así como la pluralidad educativa, la libertad de elección de centro y la formación en valores éticos, filosóficos o religiosos".

Esta manifestación, que debía haberse celebrado el pasado día 28 de noviembre y que fue aplazada por razones climáticas, se enmarca dentro de las organizadas por la plataforma Más Plurales en otras ciudades de España.

Una manifestación que ha contado con el apoyo de PP, Cs y Vox que rechazan la reforma educativa del Gobierno de Pedro Sánchez "cargada de ideología y que es un atropello a la libertad educativa y un ataque contra la Educación Concertada y Especial". Los partidos de la oposición defienden una educación bilingüe sin inmersiones.