De la oscuridad a la luz pascual: El mensaje de esperanza del obispo de Mallorca

Un año más, la celebración de la Pascua trae consigo un mensaje de gozo y esperanza desde el corazón de la Iglesia en Mallorca. El obispo de la diócesis, monseñor Sebastià Taltavull, ha dirigido unas palabras en un vídeo a los fieles en las que subraya la necesidad de ser "peregrinos de esperanza" en un momento global marcado por la incertidumbre y el sufrimiento.

Jubileo y Esperanza en Tiempos de Oscuridad

El primer motivo de alegría, según monseñor Taltavull, reside en el Jubileo que la Iglesia está celebrando, una invitación a ser "peregrinos de esperanza justo en un momento en que la necesitamos más que nunca". El obispo no ha obviado las "tantas sombras que oscurecen, pueblos y ciudades, familias enteras, gente inocente que cae bajo la violencia de las bombas", mencionando el hambre, el exilio y la soledad como realidades dolorosas de nuestro tiempo.

Para monseñorTaltavull, este momento evoca un "largo Viernes Santo de un Jesús, constantemente, clavado en la cruz que abre los brazos y a través de nosotros quiere acoger a una humanidad que necesita ayuda, solidaridad, perdón, reconciliación y sobre todo, sobre todo necesita justicia, amor y paz". El obispo enfatiza la identificación de Jesús con el sufrimiento humano: "Jesús padece con todos los que padecen. Jesús muere con todos los que mueren".

¿Cómo Celebrar la Esperanza en un Mundo Incierto?

Ante la pregunta de "cómo hablar de esperanza y felicitarnos ante todo lo que la humanidad estamos viviendo", el obispo de Mallorca reconoce el desafío de manifestar la alegría pascual en un contexto de incertidumbre, especialmente para jóvenes, desempleados, migrantes y ancianos. Sin embargo, encuentra la respuesta en un mandato divino: "Tenemos que estar siempre a punto para dar una respuesta a todos y debemos hacerlo, dice, suavemente y con respeto manteniendo la rectitud de conciencia".

El obispo recurre a la Palabra de Dios para recordar que "esta esperanza la poseemos como un ancla segura y firme" y que "la esperanza no defrauda, porque Dios dándonos su espíritu, ha derramado su amor en nuestros corazones". Citando al Papa Francisco, Mons. Taltavull destaca cómo "el espíritu Santo, con su presencia perenne en el camino de la Iglesia que irradia en los corazones de los creyentes, [enciende] la luz de la esperanza", una llama que "nunca se apaga para dar apoyo y vigor a nuestra vida".

La esperanza cristiana, insiste el obispo, "no engaña ni defrauda, porque está fundada en la certeza de que nada ni nadie podrá separarnos nunca del amor de Dios, porque está fundada en la certeza de que nada ni nadie podrá separarnos del amor de Cristo". Es esta fe y este amor los que permiten seguir adelante, ofreciendo "muchos motivos de esperanza, motivos para felicitarnos y desearnos una buena y santa Pascua, que no dure solo un día ni una semana sino siempre".

La Luz de Pascua Vence la Oscuridad

Sebastià Taltavull concluye su mensaje recordando que "la noche oscura del Viernes Santo debe ceder el paso a la noche y al día luminoso de Pascua ya que por la resurrección Jesús ha vencido la muerte, ha vencido el pecado y todo mal y ha abierto para todos sin distinción el camino esperanzado de la vida, una vida para siempre". Subraya que esta esperanza "no se fundamenta en bienes materiales, sino en la promesa de Dios".

Finalmente, el obispo anima a los fieles a que, en un mundo marcado por la incertidumbre, "la esperanza cristiana ofrece fortaleza y consuelo los que unidos a la oración, al amor y la confianza, crean constantemente gestos de caridad hacia los demás necesitados de afecto y de salud. Eso sí sembrando el amor que no acaba nunca y son siempre fuente de felicidad". Concluye su mensaje con un deseo sincero: "Pascua es la razón de fondo, pues mi deseo para todos de una buena y santa Pascua, llena de la esperanza en Cristo resucitado".