Viaja a Mallorca, se queda en un hotel con piscina y alucina con lo que pasa todas las mañanas
El verano en las islas es sinónimo de turismo extranjero y son muchos los españoles que siguen sorprendiéndose al ver escenas que pertenecen al entorno estival
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Barcelona, San Sebastián, Canarias, Baleares, Cádiz o Málaga son algunos de los lugares donde se han celebrado multitudinarias manifestaciones para protestar contra el modelo de turismo. Pero esto no afecta a los extranjeros, que siguen dejando imágenes que ya son tópicas en España, como la que destaca esta joven en un hotel de Mallorca.
A medida que se acerca la temporada alta vacacional en el hemisferio norte, también lo hace una creciente ola de sentimiento antiturismo entre los habitantes de los destinos más populares en verano. Las recientes movilizaciones en las calles de Canarias han puesto de manifiesto que muchos residentes de lugares excesivamente visitados quieren un mejor tipo de turista.
Actualmente, en muchos destinos del mundo se discute sobre el tipo de turistas que quieren en sus calles y el que no. Los que gastan dinero en las tiendas, impulsando la economía local, y se comportan con respeto, están en la lista de los aprobados. Pero en las islas saben mucho de turismo que causa problemas.
En la lista de los rechazados están los turistas que se emborrachan, que se comportan mal, faltan al respeto a las tradiciones locales y afectan negativamente la vida de los locales. Siempre ha habido turistas que se han comportado mal, pero ahora hay más que nunca y se hacen notar más con las redes sociales.
Un hotel
El turismo va camino de superar todos los récords otro año más. Ni el aumento de los precios de los billetes de avión, de los hoteles y de los paquetes que ofrecen las agencias de viajes pueden con el principal sector de la economía española, el que más empleo y riqueza genera.
El calor y las altas temperaturas traen siempre consigo viajes a la playa y estancias en hoteles con el objetivo de disfrutar de una o varias semanas de descanso y tranquilidad. Este año, como ya suele ser habitual, gran parte de los turistas que visiten España serán de origen extranjero.
Pero también hay problemas en los hoteles. Una de las escenas que se repiten todos los veranos son los altercados por conseguir una hamaca. Los turistas que deciden madrugar para ser los primeros y poder reservar la mejor tumbona generan una imagen como si de una carrera a contrarreloj se tratara.
A primera hora de la mañana, decenas de turistas llegan a la piscina del hotel para colocar su toalla en su tumbona favorita y reservar así sitio para todo el día. Algunas veces, incluso, se han vivido momentos de tensión entre los bañistas. Por mucho que los gerentes repiten que esto está prohibido, siguen repitiéndose.
Lo que pasa todas las mañanas
Cada día, los turistas se despiertan, bajan a la piscina, dejan su toalla en la tumbona y, posteriormente, van a desayunar, bajan a la playa o incluso regresan a su habitación para seguir descansando. Algunos deciden tomar la justicia por su propia mano, como esta joven valora al ver lo que pasa en su hotel.
Las redes sociales siguen sorprendiéndose de ver todas las toallas de las tumbonas que no están ocupadas en las piscinas de los hoteles a primera hora de la mañana. La guerra de las tumbonas parece que nos va a seguir dejando imágenes virales durante otro verano como este vídeo.