Proyecto “13 Casas”, el etxebide de los excluidos
La diócesis de Vitoria impulsa este programa para facilitar el acceso a la vivienda de las personas más vulnerables

Proyecto 13 Casas de Berakah
Vitoria - Publicado el - Actualizado
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Desde hace cuatro años, la diócesis de Vitoria desarrolla el proyecto "13 Casas", una iniciativa que busca viviendas de alquiler para personas en situación de vulnerabilidad, quienes enfrentan grandes dificultades para acceder al mercado privado de alquiler. Este proyecto, gestionado por la obra social Berakah, se define como "el Etxebide de los excluidos", ofreciendo una solución para aquellos que no pueden beneficiarse de las vías tradicionales de acceso a la vivienda, como las ayudas públicas o los programas de inclusión.
Una respuesta a una realidad oculta y dura
Para muchas de las personas recién llegadas a la ciudad, la falta de empleo y padrón las excluye del sistema de ayudas sociales, obligándolas a vivir en condiciones de hacinamiento e infraviviendas. Berakah interviene en este contexto con dos hogares de acogida, Belén y Ainkarem, destinadas a mujeres solas con hijos y familias completas, respectivamente. En cada uno de ellos conviven hasta 15 familias por períodos temporales de entre 9 meses y un año.
"Tras ese tiempo, las familias deben dar el salto al mercado libre, pero en muchos casos es imposible", explica Álvaro Salazar, voluntario de Berakah. Para abordar este desafío, surgió el proyecto "13 Casas", que actúa como intermediario entre arrendadores y personas vulnerables. "Garantizamos el pago del alquiler y financiamos pequeñas mejoras en las viviendas para dar tranquilidad a los propietarios", añade Salazar.

Imagen del proyecto 13 Casas
Resultados y retos pendientes
El proyecto ha logrado movilizar 13 viviendas al año desde su inicio, alcanzando un total de 40 pisos disponibles. Sin embargo, la demanda sigue siendo alta. Actualmente, 30 familias alojadas en los hogares Belén y Ainkarem necesitan una vivienda o, al menos, una habitación.
El perfil de los beneficiarios también está cambiando: cada vez hay más personas solas que no pueden permitirse alquilar una vivienda completa. "La demanda es tan alta que hay quienes pagan 400 euros por una habitación, sin derecho a cocina ni sala", denuncia Salazar. Ante esta situación, Berakah hace un llamamiento a los propietarios para que ofrezcan sus viviendas o habitaciones en alquiler.
creciendo gracias a la solidaridad
Próximamente, Berakah sumará siete viviendas más a su red gracias a una donación y al apoyo de la Fundación Vital, que se encargará de la reforma y adecuación de estos inmuebles. "Necesitamos muchas más viviendas para seguir ofreciendo oportunidades a quienes quedan fuera del sistema", concluye Salazar.