Las tormentas de agua y granizo inundan Euskadi: "Está todo destrozado, es para llorar"
Las localidades más afectadas hacen balance de daños materiales en COPE Euskadi
Madrid - Publicado el - Actualizado
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"Está todo destrozado, es para llorar", así vive Conchi, propietaria de un invernadero en Igorre, el día después de la brutal ganizada. Este martes toca hacer balance de daños materiales tras las tormentas de agua y granizo han barrido Euskadi de este a oeste, siendo Igorre uno de los municipios más afectados, que ha dejado sin negocio a cientos de igorreztarras. "Tenemos que cerrar sí o sí porque está muy peligroso", insiste.
Este mediodía tanto servicios de limpieza como vecinos siguen trabajando para recuperar la normalidad como también lo hace Conchi, que se ha despertado con el invernadero "roto y agujereado". "Ahora estamos intentado salvar algunas cosas, todo lo que podamos" y a la espera de "lo que diga el seguro". Una situación que le llevará a "cerrar 15 días", justo en la que considera la "época fuerte del sector", a las puertas del Día de Todos Los Santos.
Momentos duros para los vecinos de la localidad que recuerdan con miedo la granizada que sacudió gran parte del municipio en apenas media hora. "Estuve metida en una cámara frigrorífica hasta que paró".
"Podemos hablar de normalidad, pero no podemos evaluar los daños"
El agua además anegar calles y afectar a empresas privadas, también inundó instalaciones publicas. Es el caso de Ermua, donde las trombas de agua inundaron zonas como el fronton, el Ayuntamiento, y el polideportivo. El alcalde de la localidad, Juan Carlos Abascal insiste en que todavía "no podemos evaluar los daños" ya que "habrá que ver la evolución futura". SIn embargo, llama a la tranquilidad de los vecinos y recalca que ya "podemos hablar de normalidad" tras "haber recogido buena parte del agua"
El minucipio vizcaíno "registró de 45 l/m en menos de una hora" y el gran problema se produjo en "el río cercano al Ayuntamiento que estuvo a punto de desbordar".