Alergias primaverales: herramientas clave para minimizar los síntomas
El especialista de Ribera Practiser, Ángel Julio Huertas, ofrece pautas para detectar cuándo acudir al médico y cómo aliviar los síntomas

Con la primavera llegan las alergias, especialmente al polen
Murcia - Publicado el - Actualizado
4 min lectura
Llega la primavera coincidiendo con el día de la felicidad, pero también es un periodo de poca alegría para quienes tienen alergias al polen o que se ven agravadas con las circunstancias climáticas de este periodo del año.
Ángel Julio Huertas, alergólogo de Ribera Practiser en Cartagena, explica las principales claves de la alergia primaveral, pero recordando que hay una más prevalente en nuestra zona. "Sí, efectivamente hay un grupo importante de pacientes alérgicos que en estas semanas, hasta que entre el calor a mediados de junio, pues van a pasarlo mal. Van a tener síntomas respiratorios, pero a mí me gusta insistir que sobre todo en una zona como la nuestra, en el Levante, en la costa de España, hay alergias que están todo el año, como la de los ácaros, que con mucha diferencia es mucho más prevalente que la alergia al polen".
A veces los síntomas pueden confundirse en un inicio con los últimos resfriados invernales. "Bueno, los síntomas de la polinosis, de la alergia estacional debido al polen y un resfriado común, pues son parecidos, es decir, congestión de nariz, una mucosidad líquida, estornudos, picor tanto de nariz como de ojos, los ojos llorosos y en algunos pacientes, pues puede haber también episodios de asma, es decir, tos sobre todo por las noches o al caer la tarde y la sensación de que tienes un peso en el pecho que no te deja respirar".
Indica como diferenciarlos. "Esos síntomas son muy similares y la única manera de diferenciarlos, salvo haciendo técnicas complejas (que no son habituales, como sería hacer un estudio de la mucosidad nasal para ver qué células son las más abundantes en ella, pues hay que tener en cuenta que el catarro es limitado, es decir, va a durar unos pocos días y estos pacientes alérgicos al polen, pues van a tener estos síntomas durante muchas semanas hasta que entre el verano y lo habitual es que no sea el primer año que lo tengan".

Ángel Julio Huertas, alergólogo
Cuando debemos acudir al especialista. "Pues si tienes esos síntomas, ese catarro que no termina de curarse y empeora sobre todo los días de viento cuando estás en la calle y notas que te pican mucho los ojos y los estornudos, pues deberías de pensar que puedes tener una alergia al polen y deberías de acudir a hacerte un estudio alergológico, porque si lo pillamos en unas fases tempranas la enfermedad, aparte de prevenir muchas veces que puedas tener un asma, pues aparte del tratamiento sintomático a base de antihistamínicos y spray para nariz o colirios para los ojos, pues podemos hacer un tratamiento con una inmunoterapia, es decir, lo que la gente conoce popularmente en la calle como las vacunas y pueden frenar la evolución de la enfermedad".
La contaminación es un factor que va en contra de los alérgicos. "Bueno, sí, la contaminación en el caso concreto del polen que estamos hablando, pues el polen en las grandes ciudades, en ambientes muy contaminados, es mucho más agresivo que el polen en mitad del monte o en una zona rural".

Las alergias pueden tratarse y minimizar los daños
"Y luego pues también está, pues el cambio climático del que tanto se habla hoy en día y que lo que sí vamos viendo, yo que ya voy teniendo una edad, es que antes teníamos, cuando yo empecé, que era jovencillo, como muy grabados, que según el mes había unos pólenes típicos en la zona donde vivíamos y eso (pues ahora empieza a cambiar mucho. Llevamos unos años en la zona donde yo trabajo, en el Levante, donde prácticamente no hay invierno y entonces los pólenes no entienden de que hoy sea la primavera o es enero o es agosto. Entienden de unas condiciones de humedad y temperatura (que son óptimas para que la planta polinice buscando reproducirse", advierte.
Quienes sufran los síntomas deben evitar ciertas actividades en esos bonitos días de la primavera. "Si viajamos en el coche, pues viajar con las ventanillas cerradas. Con ventilar la habitación donde dormimos en 15 o 20 minutos es suficiente para el efecto de ventilar y airear la estancia y no hace falta tener todo el día la ventana abierta, porque si no todo el polen que está en el aire pues va a entrar en la habitación y cuando durmamos pues vamos a estar respirando ese polen".
La mascarilla a la que la población se adaptó con el COVID es una buena herramienta. "La gente ahora tiene menos vergüenza de utilizar una mascarilla. Pues en días que hay una concentración alta de pólenes, que muchas veces se puede ver porque en los telediarios y en los noticieros aparecen a veces noticias de las concentraciones de polen en las zonas donde vivimos, pues esos días pues si no nos queda más remedio que ir al campo o ir por la calle, pues llevar una mascarilla nos puede ayudar a prevenir la polinosis, igual que llevar unas gafas de sol pues hace que el polen no nos dé directamente en la conjuntiva y de alguna manera podamos minimizar los síntomas".