El Puerto entrega a la Cofradía Marraja la llave de la Puerta Monumental de la Pescadería

La Agrupación Marraja Nuestro Padre Jesús Nazareno ya atesora la Llave de la Puerta Monumental de la Pescadería desde la que partirá el trono de Nuestro Padre Jesús Nazareno, en la madrugada del Viernes Santo, hacia su Encuentro con la Virgen Dolorosa “la Pequeñica”, en la Plaza de la Merced, en un acto que ha tenido lugar en la sede de la Cofradía Marraja y donde han participado el vicepresidente de la Autoridad Portuaria, Pedro Pablo Hernández, el Hermano Mayor de la Cofradía Marraja, Francisco Pagán, el presidente de la Agrupación Marraja Nuestro Padre Jesús Nazareno, Manuel Hernández Aguado, y el director de la APC, José María Gómez.

Este tradicional acto se enmarca en los actos preparativos de la Cofradía Marraja para la procesión del Encuentro. Pedro Pablo Hernández ha recordado que “la Puerta Monumental de la Pescadería solo se abre en la madrugada del Viernes Santo para que nuestro Padre Jesús Nazareno pueda recorrer las calles del barrio de Santa Lucía hasta su llegada a la Plaza de la Merced donde tiene lugar en el encuentro entre Nuestro Padre Jesús Nazareno y la Pequeñica”.

“Este acto es un símbolo de unión de la Semana Santa con el Puerto de Cartagena, donde la Agrupación Marraja Nuestro Padre Jesús Nazareno tiene su casa en la Cofradía de Pescadores. Una unión de más de 40 años con los empleados de la Autoridad Portuaria y del Puerto que han participado siempre en los preparativos de una de las procesiones más significativas de Cartagena”, ha destacado el vicepresidente.

La puerta monumental de la Pescadería, fabricada en los talleres de la desaparecida empresa Tamar, se colocó en marzo del año 2.000 con el propósito de evitar que el tercio marrajo tuviera que girar tres veces antes de poner rumbo a Santa Lucía, y es tradición desde entonces que se abra una sola vez al año, para que pase Jesús Nazareno. La Autoridad Portuaria de Cartagena custodia durante todo el año las llaves de esta magnífica puerta, y unos días antes del Viernes Santo, se celebra este acto por el que las llaves quedan en poder del tercio de Jesús Nazareno hasta finalizar la Semana Santa.