"De poco puede servir la Conferencia de Presidentes autonómicos si las cosas de comer se deciden en otros foros"
La directora de Fin de Semana aborda las noticias políticas más importantes de la semana y otros asuntos de actualidad
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¡MUY BUENOS DÍAS ESPAÑA! Bienvenido a tu programa , esto es Fin de se Semana de la Cadena COPE y te saluda Cristina López Schlichting en nombre de todo el equipo que te acompaña sábados y domingos de diez a dos. Es un día bonito hoy, el de San Juan de la Cruz, uno de los grandes poetas del siglo XVI, si no el mejor, cumbre de la mística. Uno de esos hombres que veía más que nosotros.
Hace frío todavía, pero van a cambiar las temperaturas y subir los termómetros ligeramente. Pese a ello, seguirá habiendo lluvias sábado y domingo, sobre todo en el norte pero también en Canarias, y las heladas y la nieve seguirán presentes en varios puntos. Los detalles nos los dará Olcina a las 11:00H y esperemos poderle arrancar información sobre las próximas fiestas. Porque es que es 14 de diciembre, y en diez días estaremos a la mesa de Nochebuena. Os pillo, seguro, con los preparativos.
Me voy a ir a mi infancia, a 1975. Yo tenía diez años. Estaba veraneando en Alemania con mis abuelos cuando, en la tele germana, salió un hombre con ligera cara de águila, que las mujeres decían que era muy guapo, y mi padre comentó que era una buena elección como jefe de gobierno. El rey Don Juan Carlos había pedido la dimisión del delfín de Franco, Arias Navarro, y había puesto al hombre al que había encargado cambiar las leyes fundamentales y ayudarle a encaminar a España a la democracia.
Todavía tardarían dos años las reformas que pactaron Carrillo, Felipe González, Fraga hasta 1978 no se votó la Constitución. Los españoles decidimos que no más guerra civil. Fuimos notros, y no Francisco Franco, que había muerto más de medio año antes de aquel verano mío en 1975, los que abrieron el camino a la democracia. Lo digo porque ahora toca celebrar un año la muerte del dictador, porque así lo ha dispuesto nuestro líder, y yo me pregunto si son es una forma de compararse con Franco, en lugar de hacerlo con Felipe González, por ejemplo.
A Pedro Sánchez le crecen los enanos. Enanos judiciales, enanos independentistas, enanos injustos que quieren para ellos el dinero de todos los españoles, y por eso se ha buscado al enanito de Franco para parecer crecido en este su próximo año de legislatura. Se cumplen 50 años de un fracaso, porque si en algo fracasó Franco es en no dar paso a la reforma política que le pedían los norteamericanos, así que no hay nada que celebrar, que este señor murió en la cama.
Pero Franco hizo lo mismo que él, 25 años después de la guerra, cuando la gente se empezaba a cansar de autoritarismo, se inventó las celebraciones de 25 años de paz y remachó la matraca por todo lo grande y venga y dale que te pego para darse se pisto. Si es que esto de la propaganda está muy inventado, que al final, todos los emperadores son iguales.
Y vámonos a la actualidad, porque si alguien pensaba que iba a salir algo de la conferencia de presidentes en Santander, es un ingenuo. El gobierno de España no se decide en las autonomías ni en Madrid, se resuelve en Bruselas y en Suiza, donde se negocia el pacto de Sánchez con los independentistas que lo sostienen. A Suiza se desplazaron Puigdemont, Jordi Turull y Miriam Nogueras por parte del partido Junts y los socialistas Santos Cerdán y Juan Francisco Serrano.
No sabemos lo que hablaron porque lo mantienen en secreto, pero los temas que se traen entre manos son que la amnistía se aplique a Puigdemont, que sigue encausado por el Tribunal Supremo, que el catalán se convierta en lengua oficial en la Unión Europea, la transferencia de la gestión de inmigración a la Generalitat, que la segunda cadena de televisión se emita íntegramente en catalán en el territorio autonómico y el precio que exigen los siete diputados de Junts para apoyar los presupuestos del estado -y que son al menos 4000 millones de euros en concepto de inversiones no ejecutadas-.
De poco puede servir la conferencia de presidentes autonómicos si las cosas de comer se deciden en otros foros. Pero ahí estaban todos ellos en la foto ayer. Las comunidades del PP obligaron a convocar el encuentro de Santander acudiendo a los tribunales, que tiene bemoles. Tres años llevaba el presidente sin cumplir la ley que le obliga convocar al menos dos veces al año. Tan poco le importaba la cita que no envió papeles ni propuestas previas, te puedes imaginar el guirigay consiguiente.
Cada presidente, la mayoría del PP -que tiene 11 de las 17 comunidades autónomas-, propuso lo suyo, y Pedro Sánchez los escuchó como quien oye llover. Los temas pendientes son muy graves: el problemas de la vivienda, -sobre todo para los más jóvenes-. la inmigración, la sanidad y la financiación autonómica, en la que Sánchez quiere dar un cupo a Cataluña pero en palabras de Mazón, presidente valencianos, “Vinimos sin propuestas y nos vamos sin respuestas”.
La conclusión es una nueva cita en enero en la que, para acallar las protestas contra el cupo catalán, Sánchez ha dicho que se discutirá la condonación de deuda para todas las comunidades. Así se acallan las protestas de todos durante un tiempo y se puede seguir negociando con Junts y ERC. Y tú diras, ¿Quién pagará ese dineral? Pues tú y yo, a través de los presupuestos. ¡Será por dinero! A las comunidades que peor han gestionado, entre ellas Cataluña, les vamos a pagar sus deudas.
Visto que no se consiguió ayer nada en la Conferencia de Presidentes, es interesante analizar los gestos. Por ejemplo, ese gélido saludo entre Pedro Sánchez e Isabel Díaz Ayuso. Por ejemplo, ese embarazoso momento en que el presidente dice a Emiliano García Page que abrevie, que se ha pasado de los diez minutos que tenía cada presidente, y Page le contesta que si tiene que prorratear todos sus temas pendientes de los últimos tres años no le da tiempo a acabar. Las risas llenaron la sala.
Vamos a preguntar a Isabel Díaz Ayuso sobre lo ocurrido ayer en la Conferencia de Presidentes, pero antes dos notas de actualidad rápidas. Una, las quejas ayer de la presidenta del tribunal Supremo y el Consejo General del Poder Judicial por los ataques a los jueces. Perelló señaló que la albor de los jueces puede y debe ser criticada, pero no cabe cuestionarla de forma generalizada y permanente, acusando a los jueces de sesgos políticos, porque menoscaba la confianza de los ciudadanos en la justicia, causando un grave daño institucional.
El otro asunto es que el presidente francés tiene nuevo jefe de gobierno. Macron está atrapado ente la extrema izquierda de Melenchon y la extrema derecha de Le Pen y no sabe cómo gobernar un país donde los equilibrios parecen imposibles.