'Crónicas perplejas': “Lo mejor de los viajes, siempre son los regresos”
Habla Antonio Agredano de los viajes y la decepción que se tiene ante las expectativas con algunos que salieron mal
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En esta sección de 'Herrera en COPE', Antonio Agredano mezcla lo “cotidiano y exótico” con una particular visión de las cosas de la vida capaz de equiparar con lo más sorprendente en sus 'Crónicas perplejas'.
Hay que convivir con las decepciones. Madurar debe ser algo parecido a eso. A tener grandes expectativas y luego ver cómo la realidad nos devuelve sutilmente a nuestro sitio. Estar en un crucero y no cenar con el capitán. Viajar a una playa paradisiaca y que haya más gente que en una cabalgata de Reyes. O viajar por Italia y comprobar que, absolutamente nadie, entiende tu italiano recién aprendido en alguna aplicación de idiomas.
Los veranos son perfectos para soñar. El sol, las bebidas frías y la arena blanca. En cada verano hemos dejado una parte de nosotros. En cada verano nos ilusionamos, nos alejamos de nuestras rutinas, nos lanzamos a sitios nuevos; y luego volvemos al día a día recordando aquello de: “No hay nada como el hogar”.
Lo mejor del verano es su fugacidad. Me hago mayor y cada vez tengo más claro que las grandes cosas duran poco. Y que está bien así. Que la vida es una suma de sorbos pequeños, de sabores intensos y de placeres efímeros.
He aprendido a soñar con los ojos abiertos. Acaba el verano pero septiembre nos espera ya en el andén con una sonrisa. Somos perpetuos viajeros. Atravesamos las semanas, los meses y los años con una tierna impaciencia y un equipaje ligero. Lo mejor de los viajes siempre son los regresos.