El comentario de Santi González del martes 5 de marzo de 2019

El proceso que se está siguiendo en el Supremo a los golpistas catalanes tuvo ayer un momento clave con la declaración del secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, un relato consistente que puso las cosas en su sitio, que contó con un puntito de perplejidad que los mossos no cumplieron con su obligación, que participaba en reuniones para evitar el referéndum ilegal con quienes lo estaban organizando, que el uso de la violencia por las Fuerzas de Seguridad fue mínimo y proporcionado. El letrado del Parlament, Antoni Bayona, dejó con el culo al aire, dicho sea con perdón , a tu Maricarmen Herrera, que fue convenientemente advertida de que estaba actuando ilegalmente.

Roger Torrent, esa criatura lombrosiana que sucedió a Forcadell en la Presidencia de la cámara no pudo sumarse al mitin que preparaban las defensas, porque Marchena les cortó las alas. Torrent se puso jaque para advertir que “volveremos a votar”. ¿Será él quien organice la próxima votación ilegal? La próxima vez que vaya al Supremo no será como testigo.

Hoy va a ser de mucho interés la comparecencia del coronel Pérez de los Cobos. El proceso al procès está cambiando.

Lo que también está cambiando, ha cambiado ya, es la percepción electoral si el Gobierno del doctor Myself no palma de sobredosis. Los barones socialistas han pasado de rehuir la proximidad electoral de Sánchez (Véase Susana) y rechazar la idea del superdomingo electoral de mayo a apuntarse al chute como ha hecho Ximo Puig en la Comunidad Valenciana.

Por otra parte, no hay dos sin tres, febrero fue un mal mes para el mercado de trabajo, el peor desde 2013. Solo llevamos dos meses desde la subida del salario mínimo interprofesional, esto no ha hecho más que empezar. Remember Zapatero y su ministro Corbacho, último gran fichaje de Ciudadanos.