Del Val sobre la moción: "Ábalos quiso ser el nuevo Blas Piñar; el PP mostró su vocación de ser UDC"

Luis del Val pone el foco de la imagen del día en "Herrera en COPE" en los vencedores y vencidos del debate y votación de la moción de censura de Vox contra Pedro Sánchez:

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"Ayer, en el Estado de la Moción, Ábalos quiso ser el nuevo Blas Piñar, lo que le puso las cosas fáciles al PP, que mostró su vocación de ser Unión de Centro Democrático, prometiendo que ellos nunca serán Fuerza Nueva. Pero no veo ningún éxito aplastante, porque el que ganó fue Pedro Sánchez que, con magnanimidad de dueño y señor, está dispuesto a conceder el carnet de conservadores demócratas a los diputados del PP, siempre y cuando no les den ni agua a los autoritarios de Fuerza Nueva, quiero decir de Vox.

Pedro Sánchez, en cambio, siempre será demócrata, aunque pacte con el club de los admiradores de la banda de asesinos, y les haga la pelota a los golpistas que proclaman que volverán a hacerlo. De ahí los elogios del PSOE al PP. Están encantados. Le atan para que no lleve a cabo pactos con grupos que estén a su derecha, mientras el PSOE puede hacer pactos con los que organizan homenajes a los asesinos y tienen como portavoces a secuestradores. La moción le ha salido redonda al PSOE.

Y el primer gesto de Pedro Sánchez, el presidente de Gobierno más embustero de España desde 1977, consistió en una cínica mentira, en tenderle la mano a Pablo Casado para renovar el Consejo General del Poder Judicial. Porque no fue debido a un ataque de generosidad del presidente, tan legítimo como mentiroso, sino después de que la Comisión Eruopea y el GRECO ( Grupo de Estado contra la Corrupción) mostraran su preocupación por la descabellada iniciativa de nuestro presidente y, unas pocas horas antes de la moción, el propio Comisario de Justicia de la Unión Europea, Didier Reynders, pidió explicaciones por lo que se iba a hacer en la elección de jueces en nuestro país.

De la necesidad hizo virtud y disfrazó de grandeza lo que, simplemente, era aprovechar la ocasión para salir del charco en que se ha metido. Y, antes de que los brindis en Génova les produzcan resaca, recuerden que Vox no ha desaparecido. Podría hacerlo si rompiera los pactos en Murcia, Madrid y Andalucía. Sería una derrota escandalosa a corto plazo para el PP, y el suicidio de VOX a medio plazo. Pero me produce vergüenza hablar de quién pierde y quién gana, cuando ayer perdieron la vida más de centenar y medio de los nuestros, sin que parezca preocupar mucho a nuestras autoridades incompetentes".