La ex árbitra internacional, Marta Frías: “La pereza es una tarjeta roja en la vida”

Tras media vida ligada al silbato, deja el arbitraje orgullosa de todo lo conseguido. Marta Frías ha dirigido en la máxima categoría del fútbol femenino y fue internacional durante diez temporadas. El arbitraje se lo ha dado todo: “De los gritos solo me quedo con los bonitos, los que me hacen daño los olvido”.

Marta eligió la fecha para su retirada. Tenía una lesión de espalda que arrastraba desde hace siete años y ya le afectaba a su vida cotidiana: “Ha sido un alivio porque cuando arrastras una lesión no puedes hacer tu trabajo al 100 %”.

Su último partido lo pitó en el campo de Lezama, que es un lugar con una esencia especial: “Cuando comencé a arbitrar pité muchos derbis vascos. Es un campo que a todo el mundo le gusta”. Aquel día tuvo una despedida preciosa: “Fue algo entrañable. Pasan por tu cabeza todos los momentos vividos”. Además, Marta cuenta que arbitrando se rompen muchos techos de cristal, el último ha sido “firmar ese convenio de arbitraje femenino que nos ha puesto donde debemos”.