Marc Vidal: "Sorprende que en el país de las maravillas que nos venden, sea difícil comprar alimentos frescos"
El analista económico desgrana el último estudio de la OCU que revela que 6 de cada 10 hogares no llegan a fin de mes y las contradicciones de los datos del Gobierno
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En España, seis de cada diez hogares no llegan a final de mes, como revela un estudio de la OCU. Un asunto realmente preocupante que afecta a muchas familias y que analiza Marc Vidal en su 'Salida de Emergencia'.
"El estudio resulta en las antípodas de lo que el gobierno traslada con eso de que somos la economía que más crece de Europa, que más empleo crea y que mejor está controlando la inflación. Algo no cuadra. Básicamente, porque en pleno 2024, el 63% de los hogares tienen dificultades para llegar a final de mes. Tampoco parece lógico que, si vamos tan bien, un 72% de las familias sean incapaces de ahorrar en este país", comienza apuntado el analista económico.
Y es que estamos antes "un panorama que se evidencia con mayor crudeza en la incapacidad de millones de hogares para cubrir sus necesidades básicas: pagar por alimentos, vivienda, u otros gastos esenciales como la salud o la educación".
"El estudio de la OCU subraya algo que sorprende que suceda en el país de las Maravillas que nos venden. Concretamente, la enorme dificultad para adquirir alimentos frescos como carne o pescado por parte de la mitad de la población", focaliza Vidal.
La diferencia entre los datos macroeconómicos y los domésticos
Además, explica por qué los datos macroeconómicos dicen una cosa y los domésticos otra: "Mientras sus señorías debaten que familiar, amigo o subalterno, se lo ha llevado crudo, nadie atiende a los micro-datos. Mientras denigran la noble tarea del ejercicio político, nuestra economía transita por un punto de inflexión que muestra unos datos genéricos buenos, al apoyarse en la comparativa anual, a la vez que la población sufre la denominada economía real. Como venimos de muy abajo, pues somos el país que más se precipitó en pandemia, nuestra aritmética siempre es más favorable que la de otros países que cayeron menos".
"Algo que no es extraordinario, simplemente parece que vamos bien, cuando en realidad vamos mal como todos, aunque a nosotros se nos nota menos, por venir de más lejos. Y es cierto que, a la vez que España lidera el crecimiento de las ventas minoristas, el incremento del riesgo de pobreza aumenta. Especialmente por el desplome de la productividad, la caída de la renta per cápita, los desequilibrios en las finanzas públicas y una carga fiscal inasumible", añade el analista económico.
Y añade: "Depender del consumo interno plantea una paradoja. Por un lado, proporciona un amortiguador contra las fluctuaciones de la demanda global, pero por otro, expone a nuestra economía a riesgos internos, como el desempleo o el descenso de los ingresos disponibles. La economía española, al igual que el Titanic, navega con un optimismo a corto plazo casi irresponsable, pero el ‘iceberg’ de los desafíos a largo plazo permanece en el horizonte, quieto y amenazante. Para no chocar se requiere un capitán y una tripulación que no se discutan. Básicamente, porque en un barco no suele haber Salida de Emergencia".