Alcalde de Álora: "Hemos ido casa por casa avisando a los vecinos que la recomendación era salir de las viviendas"

La provincia de Málaga ha decretado este martes la alerta roja por amenaza de lluvias y el paso de la nueva DANA, así como ha decretado la suspensión de las clases en todos los colegios e institutos. Uno de los municipios que ha replicado estas medidas es Álora, la localidad andaluza más afectada por las tormentas el pasado 29 de octubre, aunque no dejó ninguna víctima mortal.

Su alcalde, Francisco Martínez, explica en La Linterna cómo se ha sucedido el protocolo de emergencia en esta ocasión: “Lo ultimo que nos comunica la Delegada del Gobierno es que se sube al nivel 1 y que hay que reactivar el plan de emergencia”, explica a Expósito. “Las indicaciones que nos dan es que se suspendan las clases, que todas las actividades se suspendan, y así lo hemos hecho llegar a los colegios”.

A mediodía, cuenta el regidor malagueño, tenían conocimiento de la alerta y, posteriormente, se han desplazado “a los tres puntos donde los vecinos se vieron afectados el día 29”. “Hemos ido casa por casa avisando de que la recomendación era salir de las vivienas”. Así, ha confirmado que, tras la confirmación del 112 y Protección Civil, se está evacuando a las personas de zonas peligrosas.

El estado actual de Álora ante las nuevas lluvias

A pesar de que Martínez subraya que una gran mayoría de estas casas son segundas viviendas, para las que no lo son el ayuntamiento ha puesto a disposición “un albergue para que, en el momento que la Guardia Civil nos comunique que ningún familiar o amigo los pueda alojar, que vayan”.

Pero, ¿cómo está Álora en estos momentos tras la tormenta de hace semanas y cómo afronta la nueva DANA? “Mi pueblo, afortunadamente, no tuvo que lamentar ningún daño personal, pero todas las captaciones de agua quedaron destruidas”, aclara el alcalde malagueño en La Linterna. Además, apunta, “150 kilómetros de caminos rurales han desaparecido, tenemos algunos puntos todavía que están las viviendas incomunicadas”.

“No hay vecinos aislados, son segundas viviendas, pero el que quiera acceder lo tiene que hacer a pie”, concluye.